Socia del Deportivo, residente en Bilbao
En pleno corazón del ‘Botxo’ late con fuerza un corazón deportivista que el próximo fin de semana (domingo, 12.00) asistirá a Lezama para animar a los colores blanco y azul.
Xandra Quintela, administrativa de 35 años y asidua en los desplazamientos del RC Deportivo y también en los encuentros de Riazor, disfrutará —esta vez en casa— del equipo de sus amores, al que augura un gran final de Liga y el consiguiente ascenso a la Liga SmartBank.
¿Cómo nació tu devoción por el RC Deportivo?
Yo soy natural de Bilbao pero toda mi familia es de origen gallego; desde pequeñita íbamos a veranear a A Coruña y también al pueblo de mi padre, que es Arca-O Pino; mi hermano mayor siempre ha sido del Depor, por lo que yo he crecido con una serie de referentes de este equipo que siempre me han gustado mucho.
¿Ya de niña ibas al Teresa Herrera en verano y a encuentros en el estadio herculino?
Sí, desde que tengo recuerdos ya iba al estadio, nos hacía mucha ilusión.
¿Cómo se lleva ser aficionada del Deportivo en Bilbao?
Pues lo cierto es que en el colegio lo llevábamos muy mal; siempre recordaré que cuando el Deportivo ganó la Liga iba a una escuela de monjas con uniforme y me puse por debajo la camiseta del Depor. Los compañeros de clase siempre me preguntaban “¿pero por qué eres del Depor?”. Siendo de aquí de Bilbao no lo entendían nada bien, creían que debería ser del Athletic...
¿Recibiste muchas bromas?
A ver, yo les contestaba que por qué no iba a ser del Deportivo, que era un gran equipo. En Bilbao hay un gran respeto y admiración por el Deportivo; es cierto que también porque hay mucho gallego.
El domingo imagino que no fallarás a la cita en Lezama...
Sí, por supuesto, ahí estaremos animando al Depor. Voy a ir con mi hermano, también con amigos de la peña ‘Miróbriga’ (Ciudad Rodrigo), con los que mantenemos una gran relación, y también con amigos del Deportivo de aquí de Bilbao.
Eres asidua también de los desplazamientos del Depor, ¿verdad?
Sí, me gusta mucho viajar en general y también con el equipo, obviamente. Juntarme con la gente que no ves en el día a día. Me encanta también conocer los sitios y fusionar deportivismo con turismo cultural.
¿Qué tal con la agrupación ‘Miróbriga’, que hace poco se acordaron de ti con una pancarta en Riazor?
Muy bien, en octubre estuve casi un mes ingresada en el hospital y me hicieron unas pancartas para darme ánimos. Me llevo de maravilla con su presidente, Óscar Cedeira.
¿Te desplazas con asiduidad a A Coruña para ver los encuentros del club?
Menos de lo que me gustaría, y con la pandemia todo fue aún más complicado. En los últimos dos años apenas estuve dos o tres veces. Pero generalmente solemos ir una vez al mes o así. Nos gusta mucho.
¿Te resulta muy duro ver al Depor en Primera RFEF?
Pues sí, es muy complicado de asimilar pero por otra parte también se debe extraer el lado positivo de cualquier circunstancia y, en este sentido, podemos conocer otros destinos y clubes más humildes en donde el fútbol se vive de otra manera. Vas a sitios como Calahorra o así y es también especial, aunque es una categoría que no nos corresponde.
¿Qué le ha pasado al equipo en la segunda vuelta?
No lo sé, la verdad es que ser del Depor es estar en las buenas y en las malas; es como vivir en una noria de emociones, un sufrimiento continuo.
¿Quién ha sido el principal culpable de este bache de rendimiento que ha experimentado el colectivo blanquiazul?
Pues no sabría apuntar a un solo culpable; parece que el entrenador a veces no se moja demasiado pero también los jugadores están rindiendo menos de lo esperado. Con todo, confío en que puedan recuperar su nivel de inicios del campeonato para ascender a Segunda División.
