Optimista. Óscar Cano apuesta por el positivismo y confía en la reacción del Deportivo. Pronostica que, cuando la marea cambie, el equipo "va a volar".
Al ser preguntado sobre la amenaza de un traspié ante el colíder que aleje al Deportivo a 10 puntos del Linares, el técnico contraatacó: "Tenemos que pensar que no va a ocurrir nada malo y, si ocurre, que hay tiempo suficiente para corregirlo en el partido. En el momento que se enlace un par de victorias y se cambie el chip, este equipo va a volar. En vez de diez puntos podemos ponernos a cuatro, por qué no es esa la pregunta. Vamos a intentar ser optimistas", comentó.
Respecto a su primer once reconoció que no lo tiene "claro de todo" porque le "bailan un par de posiciones".
"No voy a hablar de diferencias ni de la etapa anterior que me merece el mayor respeto. Quiero ver a los jugadores hacer aquello por lo que fueron firmados por el Deportivo. Este es un contexto muy concreto, los que convivimos con Segunda B y A sabemos el material humano que tenemos entre manos y esperemos que cada uno dé la mejor versión de sí mismo porque así conseguiremos que el rendimiento sea bueno", sostuvo.
El nuevo preparador del Deportivo admitió que todo cambio en un banquillo supone un revulsivo en las plantillas.
"Un diagnóstico certero (a nivel anímico) no se puede hacer porque la llegada de cualquier persona hace que el jugador tienda a creer que se parte de cero. Los que juegan quieren mantenerse de titulares, los que no estaban jugando quieren mostrar mecanismos persuasivos para convencer al entrenador. Los primeros días son maravillosos. Vamos a intentar alargar eso, que el jugador sienta que tiene la posibilidad de jugar y quiera agarrarse a ella. Es inevitable que haya una limpieza y vamos a tratar de que tenga sostenibilidad y que se alargue para que nadie se sienta titular, que todo el mundo se sienta capacitado para tener su momento
Entre esos jugadores a los que espera recuperar están Alberto Quiles y Gorka Santamaría, jugadores con gol que todavía no se han estrenado.
"Hay que liberarlos de la presión añadida que tienen en un club muy grande que por su grandeza, presión y exigenciam, donde es fácil caer en esa tela de araña, en la trampa de considerar que hoy valgo mucho, mañana nada, hoy vuelvo a valer... Es importante encontrar estabilidad emocional y desde el fútbol se puede conseguir, que los jugadores solo tengan que pensar en eso que saben hacer, para que encuentren esa razón de ser que fueran tan exitosos. Me comentaban que la pretemporada de Quiles fue una locura. Estoy convencidísimo de que van a encontrar ese camino porque no están tan alejados de él como ellos creen", advirtió.
