Metidos en la vorágine competitiva, entramos en la gestión analítica del discurrir de la misma, tanto a nivel colectivo, como individual. Varios son los vectores convergentes, aficionados, periodistas, directivos, técnicos y los propios jugadores. Cada uno lleva el ascua a su sardina. En muchos casos la parafernalia es amplia y recurrente.
Centrándome en la vivencia de este actual Deportivo, recurro a las palabras del máximo responsable de su banquillo, para situarme en la realidad. Borja Jiménez, desde el partido ante el Celta B, dignificó la sensatez como arma para afrontar nuevos retos. Aquí se trata de ganar la guerra. Los resultados de las “batallas” no podían ofrecer mejor balance, pero todo indica que queda un mundo por completar.
Soy muy de ciclos competitivos, más o menos largos, pero muy eficaces a la hora del análisis. Una referencia perfecta para calibrar potencialidad a lo largo del campeonato. Dejando al margen los números, está claro que este Deportivo ha logrado dar un paso fundamental, no es otro que el despertar al gigante semiinconsciente representado por la afición. Y me apropio de ese adjetivo para definir su estado de ánimo, pues entiendo que, ante tanta adversidad, estaban abocados a vivir en la somnolencia, para no sufrir más las consecuencias de tanta nefasta gestión.
Visto lo visto, nadie abandonó el barco. Simplemente se estaba expectante a que el balón rodase y el “entramado” ofreciese porciones de garantía competitiva. Nada está consolidado. Seguirá habiendo subidas y bajadas, pero lo que si todos tienen claro es que el deportivismo ha recuperado la sintonía con su equipo. Ganar 4 de 4 no es nada sencillo en ninguna competición, pero bastó una simple pincelada de un inicial ciclo para que Riazor vuelva a dar lo mejor de sí.
Desde la “urbana 8”, pasando por técnicos y jugadores, lo saben y tanto es así, que lo exteriorizan en cada intervención pública que hacen. Para todos ellos saltar al césped de Riazor y sentirse arropados por una afición espectacular, representa toda una “hemorragia de satisfacción”. Que dure la senda de triunfos, 3+3+3+3=12. ¡Un gran ciclo!.
Cambiando de tercio, Real Madrid, Barcelona y Bilbao llevaron el tema del acuerdo de Laliga con un grupo de inversión a los juzgados, piden su paralización. Tebas responde muy sibilinamente: “… no quieren que los demás puedan crecer”. Pero lo hace muy suave, por lo que todo parece indicar que no las tiene todas consigo. La pregunta es obvia: “ Adelantarán el dinero los gestores de los fondos de inversión, sabiendo que todo puede acabar como el rosario de la Aurora?.
Un último apunte para el Leyma Coruña. Se configuró una excelente plantilla para aspirar a lo máximo. Sin embargo me preocupa la presencia del Estudiantes y de Movistar. De todas formas siempre quedará otra plaza de ascenso y esa tiene buena pinta. Mucha suerte. Resultaría espectacular disponer de tres equipos gallegos en la ACB.
Como siempre un placer.