El Sevilla no ha podido certificar su pase a los cuartos de final de la Liga de Campeones después de caer derrotado ante el Leicester (2-0) en el King Power Stadium, tras una primera parte de constante ida y vuelta en la que se adelantaron los 'foxes' gracias a Morgan, y un segundo tramo en el que los hispalenses pagaron cara su debilidad defensiva con el gol de Albrighton, aumentando su mala racha en los octavos de final de la máxima competición continental.
Una eliminatoria totalmente abierta tras el 2-1 de la ida que tuvo un comienzo vertiginoso, con un Leicester renovado que mostró una vez más su mejor versión en Europa y que fue capaz de inquietar la portería defendida por Sergio Rico en los primeros minutos. No obstante, lejos de limitarse a defender su ínfima renta, el Sevilla gozó de la primera ocasión del choque en las botas de Nasri, abortada por una mano milagrosa de Schmeichel.
Los pupilos de Jorge Sampaoli no estuvieron nada cómodos en buena parte de la primera parte, sitiados por la alta presión local y ciñéndose a la ardua tarea de despejar los constantes balones al área de los 'foxes'. Incapaz de imponer su juego, el conjunto hispalense optó por hacer gala de su peligroso contragolpe y así llegaron los avisos de Sarabia y Ben Yedder.
En el otro lado, un hiperactivo Vardy buscó las cosquillas de la débil defensa sevillista, buscando el ansiado gol que no consiguió en la fase de grupos y que sí hizo en el Pizjuán. Pero no fue el ariete inglés, sino el central Wes Morgan quien estrenó el marcador a balón parado con un remate algo fortuito con la rodilla. Un fallo defensivo de los de Nervión, nada contundentes en el marcaje, que ponía la eliminatoria a favor de los locales en el minuto 27.
Contra las cuerdas hasta el final de la primera parte, los de Sampaoli buscaron la reacción a raíz del descanso dando entrada a Jovetic y Mariano. Con los cambios, el Sevilla consiguió deshacerse de la presión continua a la que fue sometido en los primeros compases y ganó la posesión de balón. Un intercambio bonito de golpes de ambos equipos desde entonces que dejó un latigazo de Escudero que se topó con el larguero de la meta defendida por Schmeichel.
Fue la ocasión más clara de los nervionenses para igualar el choque y, con ello, decantar sobremanera la balanza a su favor. Sin embargo, el balón no entró esta vez y sí lo hizo poco después en la otra portería. Un rechace de la defensa sevillista al borde del área era recogido por Albrighton, que sin oposición ni marca alguna, batía a Rico por abajo para poner más de cara la clasificación del Leicester.
Una notable debilidad en la segunda jugada que a punto estuvieron de pagar caro nuevamente, pero que Vardy mandó muy por encima de la portería sevillista. La respuesta andaluza no se hizo esperar y Vitolo hizo trabajar al meta danés de los 'foxes' con un fuerte chut desde dentro del área que a punto estuvo de rebajar la euforia en el King Power Stadium.
EXPULSIÓN DE NASRI
A falta de 15 minutos para la conclusión y con el Sevilla volcado en campo contrario, llegó la acción que terminó de desbaratar las opciones del cuadro blanquirrojo. El fuerte carácter de Nasri le jugaba una mala pasada -provocado en gran medida por Vardy- y veía su segunda amarilla tras un rifirrafe con el delantero internacional inglés.
Sin embargo, la expulsión del francés no hizo bajar los brazos al conjunto andaluz, que contó con la oportunidad de poner el 2-1 con un penalti en el minuto 79. Vitolo era derribado por Schmeichel y el colegiado decretaba la pena máxima. Sin embargo, la mala fortuna maltrató nuevamente al Sevilla en los octavos de la Liga de Campeones como en 2008 y 2010. El meta danés adivinaba la intención de N'Zonzi desde los once metros y evitaba el empate en la eliminatoria.
Pagó su desesperación el Sevila en los últimos minutos, con un Sampaoli que acabó expulsado y evitando hasta en dos ocasiones Sergio Rico la sentencia de Vardy tras sendos contraataques del Leicester. Así, el club de Nervión se quedó otra vez, y de forma cruel, a las puertas de los cuartos de final de la máxima competición continental. Una ronda donde sí estará el vigente campeón de la Premier League, que certifica su metamorfosis tras la destitución de Ranieri y que conocerá rival en el sorteo de cuartos en Nyon el próximo 17 de marzo.
El Sevilla vuelve a atascarse en octavos ante un renovado Leicester
