Campeón en el grupo 1 de Segunda División las dos últimas temporadas, es la bestia negra del Depor Abanca. Dominador del fútbol femenino en el Noroeste español desde hace dos décadas, es el rival a batir. Otrora Oviedo Moderno, ahora Real Oviedo, o los dos, el sábado espera la visita del equipo coruñés en el partido más esperado del año.
Bajo la dirección técnica de Pedro Arboleya, que cumple su segunda campaña en el banquillo, el conjunto ovetense mantiene un bloque fiable y reforzado con jugadoras de Primera. Ha perdido a tres pesos pesados, la portera Cheza, la central Mery y la carrilera zurda Érika, que el sábado jugará de blanquiazul.
La dirección deportiva no ha perdido el tiempo y ha incorporado nuevas piezas que le dan mayor versatilidad en ataque y profundidad en la rotación. Las caras nuevas son la viguesa Carol, con experiencia en el Oiartzun y el Sporting Huelva, la paraguaya Loli Villamayor, que militó en el Zaragoza y llega del fútbol sudamericano, la lateral zurda Marta Reyes y la central Gordillo, que vuelve a casa, las dos procedentes del Santa Teresa, las porteras Sara y Nuria y la mediapunta Cuque, coruñesa formada en el Orzán y ex del Victoria que hasta ahora ha tenido un papel testimonial.
Completan la plantilla jóvenes y veteranas de la cantera ovetense, entre las que destacan las centrocampistas Pecas y Henar, vitales en el triunfo de su equipo el pasado marzo en Arteixo y que le valió el título, o la delantera Isina, que anotó los dos tantos que tumbaron al Deportivo.
Arboleya tiene dónde elegir. Tanto es así que esta temporada ha contado poco con dos futbolistas antaño habituales: las centrocampistas Yoli, con problemas extradeportivos, y Zape, que ha dejado paso a las más jóvenes.
Equipo intenso y muy competitivo, ha ganado todos los partidos, como el Depor, salvo un empate contra el Monte cántabro, en la jornada ocho. En Santander perdió el liderato en solitario por el golaveraje a favor del Depor. Y es que el potencial anotador de las asturianas no es tan alto como el de las blanquiazules. La solidez defensiva y el valor del grupo son sus puntos fuertes.
Arboleya ha alternado, según partidos o momentos, el 1-4-2-3-1 y el 1-4-1-4 con la campeona del mundo sub-17 Pecas como referencia por delante de la defensa. Aunque puede actuar de central, el sábado será casi seguro la sombra de Teresa. Esa misma táctica le dio un gran resultado el año pasado en Arteixo, aunque jugando en casa debería proponer algo más. Del césped sintético del Díaz Vega, a la hierba natural de El Requexón. Huele a partido grande.
