El Deportivo recibe mañana al mejor rival posible para iniciar el despegue clasificatorio que tanto necesita. La escuadra que dirige el técnico Rubén de la Barrera se enfrenta al Guijuelo, equipo que cierra el grupo con nueve puntos en once partidos; que no vence desde el pasado 1 de noviembre, cuando consiguió su único triunfo de la temporada; y que ha sido incapaz de vencer en sus seis encuentros a domicilio.
Una victoria, seis empates y cuatro derrotas es el balance de la escuadra chacinera, que desde que se impuso al Salamanca UDS por 2-0 en el derbi charro, encadena ocho jornadas sin saborear la victoria.
El pobre rendimiento del Guijuelo llevó a la directiva a destituir a los hermanos Jacobo y Marcos Montes el pasado domingo, un día después del empate con el Compostela en el Municipal Luis Ramos (1-1).
El lunes, Chuchi Jorqués tomó las riendas de la plantilla chacinera y, casi sin tiempo para transmitir sus conceptos a los jugadores, el equipo salmantino afrontó un nuevo compromiso, el partido aplazado con el Pontevedra en Pasarón, que se saldó con un empate sin goles.
Se trataba de la sexta salida del Guijuelo esta temporada y, una vez más, los chacineros fueron incapaces de conseguir la victoria.
En total, los charros suman cuatro derrotas lejos de su estadio —frente a Zamora (3-2), Compostela (3-0), Coruxo (2-1) y Unionistas de Salamanca (1-0)— y han sacado dos empates —ante Salamanca UDS (2-2) y Pontevedra (0-0)—, precisamente en sus dos últimos desplazamientos.
El Depor intentará que el cuadro chacinero encaje su quinta derrota a domicilio.