Eneko Bóveda ha reconocido esta mañana, antes del inicio de la primera de las dos sesiones de entrenamiento  que afrontará hoy el Deportivo, que los futbolistas blanquiazules se han “pegado un  buen  golpe con la realidad”, tras el pobre rendimiento en las diez primeras jornadas de Liga, que han propiciado el cambio de entrenador.

“Cuando empieza la temporada, uno  se imagina todos los escenarios buenos y seguramente es una situación que nadie se esperaba y que era una posibilidad pero remota. El fútbol  nos ha mostrado su peor cara, nos hemos pegado un buen golpe con la realidad y las valoraciones no hay que hacerlas definitivas a estas alturas, pero la pena es que, como esto tiene los ritmos que tiene, que este mal inicio haya costado el trabajo de una gente que tenía toda la ilusión del mundo”, ha manifestado en la sala de prensa de Abegondo.

Sobre la llegada de Luis César ha manifestado: “Con energías renovadas, las orejas tiesas, no con más interés que el último día con Anquela porque en todo momento hemos escuchado e intentado hacer las cosa bien, aunque no salieran, pero  al ser la novedad hay ese efecto de más excitación y estamos expectantes para cuanto antes captar las ideas más básicas que se pueden captar estos días”.

El zaguero bilbaíno, que en este arranque de curso ha actuado como lateral derecho, tiene muchas opciones de jugar en el centro de la defensa, debido a la ausencia de Lampropoulos y Montero por estar concentrados con sus respectivas selecciones nacionales.

“Como todos los jugadores, cuando viene un entrenador nuevo, tenemos la sensación de que nadie cuenta con las vidas extra y nadie está titular ni suplente, entonces todos estamos con esa duda de si le gustaré o no. Dentro de eso, jugar en cualquier posición para mí va a ser motivo de alegría”, ha indicado.

Bóveda ha recalcado la necesidad de sacar “el orgullo”, debido al elevado número de bajas con las que afrontan el duelo con la UD Las Palmas.

“En este partido se dan unas circunstancias especiales en las que el equipo va con lo que va y lo tenemos que tomar con una inyección de fuerza, de orgullo, de decir estamos los que estamos, pero somos la hostia y entre nosotros lo sacamos y, como si  tiene que jugar el portero de delantero lo que sea, porque somos los jugadores del Depor y estamos preparados para esto y para más. Son semanas complicadas, pero cuando vas a entrenar y ves que las sillas están vacías, es el momento de sacar ese orgullo y dar un paso adelante”, ha argumentado.

El defensa se ha mostrado convencido de las posibilidades reales del Deportivo de sumar los tres puntos en el Estadio de Gran Canaria, pese a las siete ausencias y a la situación convulsa que vive.
“Si planteamos este partido a principio de temporada, con las mentes limpias y nadie tuviera en cuenta lo que ha pasado hasta ahora, nadie tendría ninguna duda de que una de las posibilidades reales es ganar y nosotros pensamos así”, ha afirmado.

Sobre el rival del domingo, ha señalado que, al igual que el club coruñés, también han tenido  “ese choque de segundo año después del  descenso en el que tienes que hacer unos ajustes y la economía aprieta”, pero considera que en su favor ha jugado que se han encontrado “con dos noticias que cambian el rumbo de todo que son Pedri, que sale de la nada y es un chaval de allí y es impresionante la alegría de todos, y Jonathan (Viera), que seguramente sea el mejor jugador de la Liga, tiene sitio en cualquier lado, domina los partidos y ha elevado mucho el nivel de ese equipo”.