Juan Pablo Barros Campos ‘Juampa’ nació en Buenos Aires (Argentina), pero a los dos años emigró a Santiago junto a su familia. Jugó en las categorías inferiores del Deportivo desde los once hasta los diecinueve años. Pero desde el Fabril no consiguió dar el salto al primer equipo blanquiazul e inició un viaje  que le llevó a moverse por el Órdenes, Racing de Ferrol, Astorga, Boiro, Coruxo, Ebro y ahora la SD Compostela, con la que fichó el pasado agosto.

Has pasado por cuatro de los seis equipos gallegos que juegan este curso en Segunda B.
Es curioso (se ríe). Llegué a Ferrol muy joven, con 20 años, y me costó, pero le tengo cariño porque salté a la Segunda B y jugué con enormes jugadores. Al Coruxo le tengo mucho cariño también por muchas cosas. Aunque el primer año no fue tan bueno porque tuve una lesión, pero el segundo fue espectacular y muy bueno para mí. Le tengo mucho que agradecer a esos equipos y a esos entrenadores.

¿Qué recuerdas de A Coruña?
Del Conxo ya llegué al Depor, que es donde pasé casi toda mi infancia y viví un montón de cosas. Estuve desde los once años, en alevines, jugué el torneo de Brunete y hasta el Fabril, que es cuando me fui. Tengo tantos recuerdos, pero del torneo de Brunete me acordaré toda la vida, estar en el hotel, con equipos como el Real Madrid, el Barcelona, equipos de la hostia, con compañeros que ahora son amigos... Y jugar en juveniles en el Depor fue increíble, en División de Honor contra el Celta, el Sporting de Gijón... con unas infraestructuras tremendas que tiene el club. Por suerte, pude estar allí muchos años y le estoy muy agracedido por todo lo que aprendí como persona y jugador.

Pero tuviste que irte para poder jugar. ¿Te quedó alguna espina clavada?
Me da mucha pena porque al final, después de estar toda la vida en el Deportivo, no pude jugar en el primer equipo y eso duele. Y tuve a compañeros que tampoco consiguieron llegar al primer equipo y que, sin embargo, ahora están triunfando en Primera y en Segunda. Jugadores que veías que tenían condiciones pero que no se les dieron oportunidades. En ese aspecto creo que el Deportivo tiene que mejorar.

¿Crees que no se te dieron las oportunidades suficientes?
No, la verdad es que no lo creo. El año del Fabril no fue muy bueno para mí porque tuve dos lesiones y me apartaron bastante del equipo, así que era difícil que siguiera, pero quizás las formas de mi salida no fueron las correctas. Pero es algo que ocurrió no solo conmigo, sino con varios de mis compañeros, que las formas tampoco fueron buenas. Siempre es difícil pasar del Fabril al primer equipo, pero el salto de juveniles a una categoría como Tercera o Segunda B ya es muy grande y hay que ayudar a esos chavales tan jóvenes y más con una cantera de un club tan grande como el Depor. Están los ejemplos de Álvaro Lemos, Pablo Insua, Juan Carlos, Dani Iglesias, Róber Pier, Jason... al final son gente de A Coruña, que estuvieron toda la vida en el Depor, y da pena que estén triunfando fuera en lugar de hacerlo en su casa.

¿Es un derbi especial para ti?
Sí, estoy muy ilusionado, muy contento. A cualquier jugador le gustan este tipo de partidos y en mi caso, debutar en San Lázaro y encima contra el Depor, es especial. Pero Me estoy dando cuenta de que voy a tener muchos partidos especiales esta temporada, cuando juegue otra vez contra el Coruxo y el Racing (se ríe). 

Pese a tu juventud, ya has jugado 135 partidos en Segunda B. ¿Cuál es el mayor peligro de la categoría de bronce?
El mayor peligro es que te confíes. Al final, si sales a un partido pensando que va a ser más fácil que el anterior, te pintan la cara porque cualquier equipo de Segunda B es súper difícil.

¿Cómo se afronta un duelo con el gran favorito, asusta?
Somos chavales jóvenes y con muchas ganas y lo preparamos igual que ante Unionistas porque son tres puntos, aunque viene el Depor y es un partido importante, pero todas las semanas tenemos que estar a un nivel alto si queremos cumplir las expectativas.

¿Qué destacarías del Depor y cómo se le puede parar?
Creo que su mejor arma, ya se vio el otro día, es que cuando ataca por banda tiene gente muy rápida y de mucha calidad. Llegan al área con mucha gente y ocupan muchos espacios para acabar la jugada. Es un equipo muy fuerte defensivamente y hay que hacer las cosas muy bien para poder ganarle. Pero conozco a mis compañeros y creo que podemos hacerles daño.

¿Hay algún futbolista blanquiazul al que te haga especial ilusión enfrentarte?
Esta semana me preguntó eso un amigo y la verdad es que todos los jugadores del Depor tienen unas carreras espectaculares en Primera y Segunda División, pero el que más ilusión me hace enfrentarme a él y a la vez me motiva poder ganarle es Álex Bergantiños porque lleva toda la vida en el club y le he visto jugar muchísimos partidos en Riazor. Y por cómo es como persona y por cómo trabaja, me parece un jugador admirable.

¿Cuál es vuestra arma?
El juego asociativo. Nos gusta tener la pelota y, a partir de ahí, creamos jugadas de peligro y tenemos más opciones de finalizarlas.

¿Cómo os afectan las bajas de Bicho y Samu Rodríguez?
Son dos jugadores súper importantes, pero hay futbolistas que les pueden sustituir y que están a un nivel muy alto. Bicho está bastante jodido porque le hacía mucha ilusión jugar, pero las lesiones son así y hay que ser fuertes para afrontarlas. 

¿Jugar sin público en el Vero Boquete os resta opciones?
Es una putada jugar sin público porque la gente de Santiago está muy ilusionada con el equipo, con volver a Segunda B. Da pena que no puedan entrar al campo y como futbolista notas que te falta algo.

¿Quieres dar un resultado?
1-0, es el que me gustaría. 

Y con un gol tuyo, claro.
Eso también me gustaría, pero al final es lo de menos. Quiero los tres puntos porque en esta liga perder dos partidos seguidos es muy jodido.