El RC Deportivo debe volver a aferrarse a la magia de su estadio para recuperar parte de su esplendor perdido en las últimas jornadas.

Aunque ninguno de los trece visitantes de la presente temporada se ha atrevido a profanar el santuario blanquiazul arrancando los tres puntos en juego, el feudo herculino sí ha visto ceder diez puntos en el tramo discurrido de competición.

Diez unidades que han volado producto de cinco empates, la mayor parte concedidos en los últimos meses.

El Málaga, favorecido por una injusta expulsión a Quique González, fue el primero en sumar en A Coruña al certificar un 1-1 no exento de fortuna; fue el 7 de octubre de 2018.

Dos meses más tarde, concretamente el 8 de diciembre, el Numancia también sorprendió al certificar un 2-2 después de que el Depor se pusiese por delante con una ventaja de 2-0. 

El irregular Lugo sacó fuerzas de flaqueza para arañar un punto en un 0-0 donde acabó con nueve hombres; el encuentro se disputó el 6 de enero de 2019, con un meta Juan Carlos en plan  salvador. 

El mismo resultado, sin goles, tendría lugar también en la visita del CD Tenerife a Marineda, en quizá uno de los duelos más flojos del Deportivo de la presente campaña.

Pero sin duda el choque que creó más dudas en el deportivismo fue el disputado hace dos jornadas en el estadio Abanca-Riazor ante el colista Nàstic de Tarragona.

Debido a un exceso de confianza o una relajación traicionera, los pupilos de Natxo González se dejaban sorprender en los minutos finales por un débil contrincante (1-1), que celebró  la igualada como la conquista de un título.

Para postularse como uno de los principales candidatos al ascenso directo, el RC Deportivo debe recobrar sus señas de identidad como local, haciendo gala de la seriedad defensiva y la pegada arriba que se convirtieron en sus líneas maestras de inicios del presente ejercicio.

No en vano, el Depor ha sacado adelante ocho envites en casa en la campaña 18-19, la mayoría de ellos con sobrada autoridad.

Los blanquiazules dieron buena cuenta de clubes como el Sporting de Gijón (1-0), Granada (2-1), Elche (4-0), Reus (2-0), Oviedo (4-0), Osasuna (2-0), Zaragoza (3-1) y Albacete (2-0).

Los guarismos conseguidos por los coruñeses evidencian que el Depor ha sabido competir con más acierto ante los llamados ‘gallitos’ de la competición, mientras que se ha dejado llevar por la mediocridad ante los aspirantes a la salvación.