El Deportivo quiere ser un equipo que asfixie a su rival desde el minuto uno, incordiándole ya desde su campo, y para ello el cuerpo técnico trabajó ayer de nuevo la presión adelantada.
Una premisa que, además, puede ayudar al conjunto a terminar con la sangría de goles en contra (ocho) que ha recibido en los tres primeros encuentros. “Queremos apretar arriba y ahí empieza la defensa. Si tu quieres hacer una cosa y tu delantero no lo hace, estamos haciendo las cosas mal”, explicó ayer Anquela.
Una idea que trató de hacer entender a su plantel. El cuerpo técnico dividió al equipo en dos grupos y mientras unos ensayaban jugadas de estrategia, el resto estaba con el míster herculino recibiendo lecciones tácticas. Además de explicar cómo tenía que moverse el equipo, en función de dónde estaba el balón, insistía a los delanteros en la presión en la salida de balón.
“¿Quién va al portero?”, preguntaba a Koné durante un momento del ejercicio. Además, pedía a sus jugadores que ocupasen bien los espacios, en el momento en el que se moviese un compañero.
Las instrucciones también fueron encaminadas a la defensa, buscando que el equipo no asumiese riesgos innecesarios al iniciar el juego. “Dani, si ves problemas le pegas donde tú veas”, le indicó Anquela al arquero. Mientras, el otro grupo, a las órdenes de Esteve, practicaba ataque y defensa de estrategia. Un aspecto a mejorar, sobre todo tras los goles sufridos ante el Rayo Vallecano.
Enfermería
El Deportivo cuenta actualmente con cuatro jugadores en la enfermería: Borja Valle, Samuele Longo, Peru Nolaskoain y Michele Somma.
Al igual que el miércoles, ayer se retiraron antes y no participaron en la sesión. Valle sufre una inflamación en el dedo meñique que ya se lastimó el año pasado, Somma un esguince de rodilla, Peru se recupera de su operación de apendictis y Longo de una lesión muscular de grado I.