Fede Cartabia fue determinante en la victoria del Deportivo en un encuentro al que los coruñeses llegaban con dudas.
El equipo había ganado solo uno de los seis anteriores encuentros y había perdido posiciones en la clasificación. Recibía al segundo clasificado, un rival directo, y el triunfo era clave. El camino hacia él lo despejó Cartabia. Desde el primer minuto dejó claro que era su día. Estaba con ganas de celebrar su 26 cumpleaños con una actuación redonda.
Exhibió desparpajo por la banda con un taconazo para David Simón, guió al equipo y disipó las dudas. Probó puntería en una falta a media distancia que se fue a unos centímetros de la portería del Albacete. Y en la segunda, en la frontal del área, no falló.
Apenas se alejó del balón. Era un disparo de precisión, de colocación y fuerza. El esférico superó la barrera por arriba y entró ajustada al poste izquierdo de la meta de Tomeu Nadal, que no pudo despejar y, además, acabó impactando contra la madera.
No finalizó ahí su repertorio. Participó, se ofreció y se gustó con el esférico. Volvió a sacar de la chistera otro taconazo, estuvo atento en la presión. Un día inolvidable para un jugador que desea que las lesiones le respeten. Esta temporada y la anterior no le han dado demasiado respiro. Hace poco más de un año tuvo que pasar por quirófano por una pubalgia y la actual la comenzó con mal pie, con un esguince fortuito de tobillo en la primera jornada del campeonato, ante el Albacete en el Carlos Belmonte.
Marqué un gol importante para seguir creciendo y que me da confianza
Reapareció en la cuarta jornada, se lesionó de nuevo en la séptima, ante el Nàstic, volvió a competir en noviembre y otra vez ingresó en la enfermería tras haber dado dos asistencias ante el Atlético Osasuna (2-0). Cartabia, que lleva dos goles y cuatro asistencias en lo que va de Liga, es, como dijo su entrenador, Natxo González, un jugador “diferencial”. Le sobra calidad y le falta continuidad.
“Me encontré bien y estoy contento porque volvía a jugar, porque se ganó y porque marqué un gol importante para seguir creciendo y que me da confianza”, comentó el día después del partido.
El Deportivo rompió su mala dinámica. “Después de muchos resultados a los que no estábamos acostumbrados, se había generado dudas”, reconoció.
Jugó de extremo, pero pasó de refilón por el cambio de sistema. “Lo importante es ganar. Nos sentimos cómodos en la cancha”, admitió.
Él prioriza jugar. La posición es secundaria. “Quizás el extremo es donde más cómodo me siento porque en los últimos años me he acostumbrado ahí pero no quita que pueda jugar de mediapunta, aportar mi granito de arena ahí. Yo lo que quiero es jugar”, dijo.
Su cumpleaños fue feliz, pero con matices. “Feliz, feliz, no sé, porque es difícil por el momento personal que estoy pasando pero lo tomo como algo positivo en la vida, me dio un regalo que era marcar”, señaló. El tanto se lo dedicó a su hija y a su padre.
Regularme es importante para no recaer y tener la continuidad que busco
A sus veintiséis años, está intentando conocer más su cuerpo para evitar las lesiones que le han atormentado en su segunda etapa como deportivista, la que inició la temporada pasada.
“Sigo regulando. Cuando estoy más cansado de lo normal, paro”, explicó el futbolista de Bombal, que ante el Albacete fue sustituido en la segunda parte, ya con el encuentro resuelto.
“(Regularme) Es importante para no recaer de las lesiones y para tener esa continuidad que tanto busco”, manifestó.
Cartabia pretende conseguir objetivos personales y colectivos en la segunda vuelta. “Estoy contento. Ya lo dije muchas veces, me quieren demasiado para lo poco que han hecho. Espero ser importante, me he quedado para eso, para crecer aquí y volver donde merecemos, pero es un camino que no es fácil”, precisó.
En Riazor se siente “como en casa”. Ante el Albacete asombró a los aficionados con sus recursos por banda y con el lanzamiento de falta del primer gol. “Para un profesional ese apoyo es importante de cara a la confianza que necesitamos”, afirmó.
Tras haber marcado su segundo gol de la temporada, pidió más. “Primero que vengan los resultados, que son lo más importante, y luego uno siempre quiere mejorar sus números. No he hecho goles en el último año, pero los resultados van primero que lo individual”, declaró.
El triunfo fue consecuencia también del trabajo anímico previo al partido. “La semana pasada sirvió para ver el tipo de grupo que somos, el nivel de personas que hay dentro, sirvió para desahogarnos y hemos mejorado en lo que fallamos. Es lo importante. Cuando las cosas no están bien, es bueno que apretemos y estemos todos hacia el mismo lado”, expuso.
El Deportivo necesitaba sumar los tres puntos. “Lo importante era ganar para seguir confiando en lo nuestro. Veníamos de un par de resultados a los que no estábamos acostumbrados, llevamos una camiseta importante y estamos obligados a ganar en todas las canchas”, dijo.
La siguiente, El Molinón. El Depor no gana fuera desde el 30 de septiembre. Intentará reencontrarse con el triunfo a domicilio ante un Sporting que ha reaccionado “Los retos están para cumplirlos. Tenemos que ir paso a paso. Será un partido muy difícil; ellos están muy bien”.