Javier Rumbo Otero (Cambre, 1997), portero del Racing Villalbés, se reencontrará mañana en As Eiroas (17.00 horas) con José Luis Lemos, el entrenador que le dio la oportunidad de debutar en Tercera División con el Cerceda cuando solo tenía 16 años. El arquero del cuadro de A Magdalena reconoce que guarda “mucho cariño” al actual técnico del Bergantiños y habla sobre el comienzo de la temporada y el partido de mañana en Carballo.
¿Cómo está siendo este inicio atípico de temporada para el Racing Villalbés?
Es un poco raro por el tema de la pandemia pero hay que acostumbrarse a seguir todas las medidas. Ahora ya estamos en la dinámica adecuada y centrados en la competición.
¿Cómo te encuentras en este regreso a la competición?
El año pasado llegué en enero y pude jugar solo un mes. Este año fue bastante atípico pero a pesar de pasar mucho tiempo parado, ahora me encuentro bien. Aun así, espero coger un poco más de forma.
La pasada jornada jugaste tu primer partido del curso. ¿Qué sensaciones tuviste?
Buenas. El partido nos salió bien a todo el equipo. Nos pusimos pronto por delante y supimos gestionar la ventaja. A nivel personal me encontré cómodo y recuperé sensaciones aunque fue una pena no dejar la portería a cero (5-1).
¿Esperas tener continuidad en el once titular?
No sabemos nada sobre eso. El míster decide en cada partido y a nosotros solo nos queda entrenar fuerte. Hay que ganarse el puesto entrenando.
El Villalbés visita mañana al Bergantiños de José Luis Lemos, el entrenador que te dio la oportunidad de debutar en Tercera con el Cerceda.
Le tengo mucho cariño por lo que hizo conmigo. Yo era un niño, tenía 16 años. Así que ponerme en ese equipo, que jugó playoff y era un club importante en Tercera, no era fácil. Además siendo portero, que siempre es un puesto difícil. Le guardo mucho cariño.
¿Qué recuerdo tienes del Lemos entrenador?
Tengo buen recuerdo. Me habían echado del Depor y luego pasé un año en el Montañeros justo en un tiempo en el que el club estaba con problemas hasta que llegué al Cerceda Juvenil. Y tuve suerte porque nada más llegar, Lemos ya me subió con el primer equipo. En ese momento estaban Diego y Darío de porteros, pero al año siguiente Diego se lesionó la rodilla y Lemos apostó por mí. Me enseñó mucho a entender el juego porque a él le gustaba sacar el balón jugado desde la portería y me enseñó mucho en ese sentido. En el aspecto personal también se portó genial.
¿Eres otro portero respecto al que compitió tres temporadas en Tercera con el Cerceda?
Sí, cambié mucho. Tuve la suerte de tener buenos entrenadores y también buenos entrenadores de porteros como Méndez, César o Fran. También aprendí mucho de compañeros como Diego y Marcos Valín y ahora de Javi Pita y Viusky, que me siguen ayudando.
¿Cómo ves el partido ante el Bergantiños de mañana?
Difícil. Es un buen equipo que además juega en casa, pero nosotros también estamos bien. Será un partido igualado.
El Bergan tiene muchos y buenos atacantes. ¿Hay alguno que esperas que tu defensa marque en corto?
De los atacantes del Bergan solo pude jugar con Cano en el Cerceda y siempre dije que es uno de los mejores futbolistas con los que jugué. Tiene fuerza, es técnico y da mucho al equipo.