Una acción decisiva del incombustible Vinicius y la reivindicación con gol de Marco Asensio salvaron al campeón de Europa en Amsterdam, un Real Madrid por momentos sometido por un Ajax tan físico como falto de pegada y que se llevó un triunfo con el que acaricia los cuartos de final.

La primera aparición del VAR en la historia de la Champions salvó al equipo blanco de un justo castigo en el primer acto. Superado por la efervescencia local, el impulso de sentir la historia por regresar a octavos años después de un grupo de jóvenes talentosos que dan forma a un Ajax descarado. La presión alta provocó graves errores en salida de balón que pudieron costar caros.

Solo respiró el equipo de Solari cuando tuvo el balón. Fue menos de lo deseado. Achicaba como podía, mientras comprobaba que su rival sufría cuando se replegaba.
Una pérdida de Reguilón pudo costar cara si no es por el travesaño. Repelió el disparo de Tadic, evitando el castigo a tanta concesión defensiva. Courtois se convertía en el gran protagonista en un minuto en el que pasaba de exhibir virtudes, haciéndose enorme en una salida ante Ziyech, solo y lento para marcar, a un grave error que acabó en gol.

El cabezazo tras córner de Blind no lo blocó Courtois que dejó muerto el rechace para que Tagliafico, con coraje, lo rematase a la red. La locura local se desvaneció con el VAR. Falta por obstrucción en el área chica al portero o fuera de juego. Nadie supo lo que pitaba, pero el tanto no subió al marcador.

La imagen del Real Madrid cambió en la segunda parte. Solo podía mejorar y lo hizo con personalidad. Avisó Benzema con un disparo ajustado al poste raso al que se lucía Onana en la culminación de la primera conexión con calidad de Modric con Carvajal.
Vinicius explotó su velocidad al espacio, ganó en carrera al pase en profundidad, encaró y recortó rivales antes de asistir a Benzema. El francés definió con la precisión que aún le falta al brasileño. Su disparo a la escuadra.

Fueron momentos en los que la figura del capitán Ramos creció el día que cumplía 600 partidos con el Real Madrid, en los que el campeón debía anestesiar el duelo pero fue incapaz. Dolberg perdonó nada más salir y Ziyech empató a placer, adelantándose a todos a un pase de la muerte.

Pero Marco Asensio, que entró al campo en el minuto 73, marcó el segundo tanto del cuadro blanco.