Un triunfo que le hizo olvidar las penurias en el torneo doméstico. En la Copa, además de volver a ganar, alineó en la meta a Marcos Lavín, el cuarto portero empleado por José Ramón Sandoval en once duelos oficiales.
El técnico madrileño llega con el agua al cuello al choque ante el Deportivo y podría ser destituido si no es capaz de llevarse los tres puntos.
Lavín debutó con el primer equipo y encajó un gol en el tiempo de descuento. Este vaivén en el arco, sin un dueño claro, recuerda a la deriva que tomó esa misma posición en el Deportivo el curso pasado.
Empezó Rubén Martínez, después fue el turno de Tyton, llegó en el mercado de invierno y tuvo sus oportunidades Costel Pantilimon, debutó Francis Uzoho y falló en su estreno Maksym Koval.
Sin dueño claro
El reparto de actuaciones de los diferentes guardametas del Córdoba es el siguiente: Abad (7), Stefanovic (2), Alberto (1) y Lavín (1). A pesar de las probaturas, el cuadro andaluz hace aguas en defensa y tiene el dudoso mérito de ser el equipo más goleado (21) en nueve partidos ligueros.
Lavín, formado en las categorías inferiores del Real Madrid, se estrenó en el torneo del ‘K.O’, tras sufrir una lesión de muñeca, que le había mantenido alejado de las convocatorias. Pese a su buena actuación ante el conjunto ilicitano, su concurso no es seguro contra el Deportivo, donde Sandoval podría dar continuidad a Carlos Abad.
Este es el que más partidos encadena y ha sido titular en los tres últimos choques (ante Granada, Osasuna y Almería, este último, único partido que ganaron los cordobeses como locales). En el apartado de la enfermería, el club andaluz anunció a través de sus redes sociales que Alejandro Alfaro hizo trabajo específico en el estadio, tras la contusión que sufrió en el partido copero, mientras que Jesús Valentín sigue sin poder completar todo el entrenamiento justo al resto del grupo.