El Villarreal cerró la primera vuelta del campeonato con las mejores sensaciones de la temporada tras ganar en San Sebastián a la Real Sociedad y con 28 puntos sumados que le acercan a las plazas de competición europea de la clasificación de Primera División.
El ‘submarino amarillo’ ha sido capaces de reaccionar en el último mes, lo que les ha permitido alejarse de la zona baja y meterse en la pelea por Europa gracias a su buen rendimiento en este periodo ante rivales de la zona alta de la clasificación.
Tres triunfos seguidos
El equipo ha encadenado tres triunfos seguidos en Liga y en campos como el Sánchez Pizjuán o el Reale Arena y a un rival como el Getafe en La Cerámica, unas victorias que además de los puntos motivaron que el equipo de Javi calleja recuperase la autoestima y encontrase una línea de juego y un equipo base.
En las últimas cinco jornadas el técnico madrileño cambió el sistema de juego, dejando el 1-4-1-4-1 para pasar al 1-4-3-3, poblando el centro del campo y asegurando más en la parcela defensiva.
A ese cambio se debe añadir la entrada de Manu Trigueros, que le ha aportado más fuerza al centro del campo y más llegada de segunda línea.
Estos cambios han equilibrado un equipo que tiene en Asenjo, Mario, Raúl Albiol, Quintillà (aunque ahora regresará Alberto Moreno tras dos meses fuera por lesión), en defensa, un centro del campo con Iborra, Anguissa y Trigueros en el medio y una línea de ataque formada por Moi Gómez, Chukwueze y Gerard Moreno.
En el primera vuelta destaca que Gerard Moreno es el máximo goleador con ocho goles, Pau Torres es el único jugador que ha jugado todos los minutos, Cazorla es el rey de las asistencias con cinco.
En contraposición, también llama la atención la escasa aportación de jugadores como Bacca, Ontiveros, Funes Mori, Rubén Peña, Alberto Moreno o Peña, que por decisiones del técnico o lesiones.