El Silva es otro. Ayer volvió a demostrar que la versión irregular del principio de temporada ya es historia consiguiendo una nueva victoria consecutiva, y van cinco, en un difícil campo como es A Porta Santa, hogar del Paiosaco.
Carlos Gómez puso a los visitantes por delante en el marcador en el comienzo de la segunda mitad y Marcos Gómez sentenció ya en los instantes finales después de varias oportunidades por parte de los dos equipos.
Fue un partido con dos partes bien diferenciadas. En la primera ningún equipo se hizo con el dominio del juego y apenas hubo ocasiones. Pablo, del Paiosaco, remató de cabeza al larguero y el Silva también rondó la portería rival con un disparo que se fue por encima de la madera. Esas fueron las oportunidades más claras hasta el descanso.
Cambio de guión
El encuentro se abrió en la reanudación. El Paiosaco tuvo que cambiar de un sistema de tres centrales a una defensa de cuatro debido a una lesión de Ventola. Juanma saltó al campo en su lugar y ocupó el lateral derecho. Y por ahí llegó el 0-1 del Silva.
El ex del Sada y el Betanzos intentó esquivar el balón para no conceder un córner pero permitió un centro del Silva que finalizó con un remate de Carlos Gómez a poca distancia de Dani Moreno.
El Paiosaco se fue en busca del empate y estuvo a punto de lograrlo. Eiroa realizó un disparo desde fuera del área que se estrelló en el poste y posteriormente Eloy conectó un cabezazo que detuvo Guillermo realizando una gran intervención.
La falta de puntería en esas acciones condenó a un Paiosaco que, no obstante, también pudo recibir el segundo gol minutos antes debido a las peligrosas contras montadas por el Silva.
La expulsión de Beto, por doble amonestación en el minuto 83, redujo drásticamente las opciones de igualada del Paiosaco y, ya al borde del pitido final, Marcos Gómez sentenció el derbi a favor del Silva en un contragolpe.