El Deportivo aún no ha recibido la comunicación de la Xunta de Galicia sobre el número de aficionados que podrá acceder al Estadio Abanca-Riazor el domingo al mediodía para presenciar el partido con el Coruxo, correspondiente a la cuarta jornada del subgrupo a del grupo 1 de Segunda División B.
Está previsto que a lo largo de la jornada de hoy el Gobierno autonómico se ponga en contacto con el club herculino para transmitirle en cuanto queda el aforo reducido de Riazor para el encuentro con el Coruxo, una cifra que también tendrá el que enfrentará al femenino, el Depor Abanca, con el Sevilla en la Primera Iberdrola.
Ayer, el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo informó de las nuevas medidas que se aplicarán para contrarrestar la segunda ola del coronavirus y abordó los límites de aforo de los recintos deportivos.
En este sentido, además de establecer que la práctica deportiva quedará restringida a deporte individual (excluyendo el deporte federado), anunció que se reducirá el aforo en establecimientos culturales (y deportivos) con un límite de 75 personas en el exterior.
El Deportivo conocerá a lo largo del día de hoy si esa es la cifra que le corresponde a Riazor, un estadio que en condiciones normales tiene capacidad para más de 32.000 personas.
El ejemplo más reciente es el de Pasaron, donde fueron 300 los aficionados del club granota que pudieron acceder a la grada para presenciar el partido del Pontevedra con el Celta B.
Los responsables de los eventos deportivos pueden solicitar un aumento del aforo presentando un protocolo de prevención de contagios de coronavirus, algo que el Deportivo ya hizo para el primer partido de la temporada.
Entonces, ante el Salamanca, pretendía meter en Riazor a 5.000 abonados, pero finalmente tuvo que reducir el aforo a 3.000, un número que, en principio, bajará aún más en el caso del choque del domingo al mediodía con el Coruxo.
Uno de los deportivistas, Celso Borges, se refirió ayer al hecho de jugar con público. “Evidentemente, lo que más nos gusta es que haya gente en el estadio. Apoyando, celebrar los goles con ellos... siempre es bueno con gente alrededor. Pero primero está la seguridad y la salud y respetaremos las mediadas que haya. Jugar con público es otra cosa, es tremendo”, reconoció.