El Ramón Sánchez-Pizjuán está preparado para el retorno de LaLiga mañana con el derbi Sevilla-Betis, después de tres meses sin fútbol por la pandemia de coronavirus y con un componente inédito al jugarse sin público y bajo estrictas medidas de seguridad y sanitarias en el estadio.
Para este primer partido de Primera que dará el pistoletazo de salida a las once jornadas que faltan para completar la temporada, LaLiga y en este caso el Sevilla, como propietario del escenario del duelo entre los eternos rivales de la capital hispalense, han estudiado todo al detalle al ser la primera prueba de fuego en la reanudación de la competición.
Al campo entrarán en torno a 250 personas, incluidos los protagonistas, el personal de organización y un reducido grupo de informadores, con la obligación de cumplir a rajatabla antes, durante y después del partido el protocolo de seguridad contra la COVID-19 acordado por los estamentos del fútbol con el Consejo Superior de Deportes (CSD).
Para ello, y siempre con la consigna de reforzar la prevención y generar un espacio de confianza y seguro prácticamente al cien por ciento, el Sánchez-Pizjuán ya tiene colocada la preceptiva cartelería de señalización de itinerarios de protección y zonas habilitadas para la dispensación de gel hidroalcohólico, guantes o mascarillas.
Los operarios del Sevilla han procedido a una limpieza y desinfección integral de las instalaciones, en especial en zonas comunes o de mayor exposición al contacto, con la instalación de pulverizadores para extremar la higiene de manos en cada banquillo, los vestuarios, el túnel de acceso al césped o dependencias como la salas de control antidopaje.
Está previsto que los equipos accedan por la puerta uno, la habitual, donde se les tomará la temperatura a sus integrantes y se aplicarán las medidas establecidas en el protocolo acordado con la CSD antes de que se dirijan a sus respectivos vestuarios.
Los participantes en el dispositivo deberán contar con un documento declarándoles aptos para acceder al estadio, entre ellos los periodistas.