Fernando Vidal está a punto de cumplir 150 días como presidente del Real Club Deportivo. Con motivo de la vuelta de dxt Campeón a los quioscos, el máximo mandatario blanquiazul concede a este diario una entrevista en la que traza las líneas maestras de un ilusionante futuro marcado, eso sí, por un duro camino para llegar hasta un escenario mejor para el club, sus abonados, accionistas y seguidores. Para el deportivismo
Han sido días duros, sobre todo los últimos meses. Cuando accedió al cargo era inimaginable pensar, por ejemplo, en una Pandemia. ¿Qué balance hace de estos casi 150 días como presidente?
Han sido días de muchísimo trabajo, un trabajo que no paró ni un instante pero que sí modificó esta Pandemia que tanto nos ha afectado a todos como sociedad. A la ya de por si complicada puesta en marcha del ilusionante proyecto con el que accedimos a la dirección del club en enero, se unió la gestión interna de todos los problemas derivados de la Covid-19, por lo que intensos e inéditos pueden ser las palabras que mejor definan estos casi 150 días al frente del Deportivo.
¿Cómo ha soportado la estructura del club este periodo de confinamiento? No ha habido Erte, las causas sociales han sido bandera de la entidad, la comunicación del club ha sido impecable, el equipo ha regresado al trabajo sin contratiempos... El Depor está ‘desescalando’ bien’, ¿no?
El Deportivo es una empresa que no es ajena a la realidad económica del país ni a las consecuencias que se derivan de esta crisis sanitaria y hemos valorado muy mucho todo lo que hemos hecho en cada momento a todos los niveles. A pesar de que tenemos una estructura con un pasivo laboral muy fuerte para Segunda División, la buena predisposición de la inmensa mayoría de los trabajadores permitió que el club pudiese hacer en estos momentos un esfuerzo por ellos, lo que, unido al enorme gesto de solidaridad de la primera plantilla profesional y el cuerpo técnico reduciéndose sus sueldos, ha ayudado a compensar y a minimizar las consecuencias. Así que, a pesar de las muchas dificultades, estamos desescalando correctamente y volviendo a esa normalidad que todos queremos, en las mejores condiciones y con las mayores medidas de seguridad para todos.
Lo inminente es la vuelta a la Liga. ¿Cómo ve al equipo?
Tengo muy buenas sensaciones, el equipo está entrenando muy bien, con muchísima carga de trabajo, por lo que vamos a llegar bien físicamente a la competición. Son once finales que, como definía a la perfección Liaño el otro día, son “una pretemporada con puntos”. Lo bueno es que hemos aprovechado para incorporar jugadores del filial en el primer equipo que están dando un rendimiento extraordinario y la máxima ilusión de todos los deportivistas es que, si fuese posible, más de uno debutara este año en Segunda División.
¿Qué vibraciones tiene del primero de los partidos y en general de la competición?
Va a ser un partido difícil, complicado, contra un rival que se juega sus opciones de entrar en el play-off estando a seis puntos de nosotros. En una liga tan igualada creo que se todos los partidos se van a decidir por pequeños detalles, por lo que nos tenemos que exigir máxima concentración en cada uno de los minutos de la competición, solo así podremos lograr el objetivo. Dicho esto, no tengo dudas de que tenemos una gran plantilla y un cuerpo técnico experimentado para afrontarla con garantías.
¿Listo para estar en un palco sin público?
Será una situación muy extraña para todos nosotros: un estadio sin público y un palco reducido en compañeros porque (en el momento que hacemos la entrevista) no podremos estar más que la mitad del Consejo en los partidos de casa. Será un partido diferente, para la historia, pero el fútbol sin afición y sin pasión no es fútbol. Alguien lo definió perfectamente: “es como bailar sin música”. El fútbol no sería nada si no fuese por la gente que acude a los estadios y vibra y lo vive intensamente. Más si cabe en el caso del Depor, con una masa social importantísima, la más numerosa de Galicia, de la que dependemos mucho por el apoyo que siempre nos da. El equipo va a tener que habituarse a funcionar y jugar sin esa gasolina.
¿Cómo están las cosas después del debate suscitado hace unas semanas con el comunicado final del club hacia las dudas del consejero Otero?
La postura del Consejo y de la inmensa mayoría del deportivismo está clara con nuestro comunicado y como afirmamos en él: “aquí se acaban las disputas”, no hay nada más que hablar de esta cuestión. Es un tema muy serio e importante que llevaremos a la Junta para que se debata y se apruebe porque creemos, firmemente, que es la mejor opción para el Deportivo.
¿Qué va a pasar en la Asamblea? ¿Por qué porcentaje se aprobará la ampliación?
No lo sé, eso dependerá de los accionistas del club. Nosotros trabajaremos porque una amplísima mayoría del Deportivismo apoye esta propuesta como una buena solución de futuro para el club, que cuente con la única legitimación posible: el respaldo del mayor número de accionistas y acciones.
Si el equipo se mantiene en Segunda, con el apoyo de los accionistas, grandes y pequeños, y de la afición, ¿Qué futuro augura para las próximas temporadas? ¿Cuándo volveremos a Primera?
El primer objetivo del Deportivo es salvarnos. No hay que perder la perspectiva de que cuando nosotros dimos el paso en la Junta de accionistas de diciembre el equipo tenía 12 puntos en 20 partidos, prácticamente los dos pies en 2ªB por lo que lograr la permanencia sería, para mí, un logro deportivo importante, aunque menor si tenemos en cuenta que el equipo partía con otra ambición cuando empezó LaLiga, pero la competición nos llevó al borde del abismo. Dicho esto, con la posible entrada de un socio financiero en el club que nos dé músculo, pero sobre el que no puede recaer todo el esfuerzo, tenemos que seguir arrimando el hombro para que el Depor pueda poco a poco levantar de nuevo el vuelo y regresar, lo antes posible, a Primera División, el sitio que nos corresponde. Pero en esa lucha hay muchos equipos implicados, todos quieren lo mismo, aunque nosotros no somos uno más.
¿Y si hubiese un descenso? Algo que nadie quiere, pero ¿cuál sería el plan?
Es un escenario que no hemos valorado en ningún momento. Nosotros solo hemos pensado en la permanencia y en jugar en Primera División, pero si el peso de no haber hecho puntos en la primera vuelta nos lleva a un descenso indeseado, creo que el Depor va a tener el músculo necesario para salir de abajo siempre que estemos todos unidos y remando en la misma dirección.
¿Cómo va a afectar la pérdida de ingresos de esta temporada para la que viene?
De manera muy importante porque ahora mismo no sabemos qué va a ocurrir la próxima temporada, si va a ser normal, con los estadios abiertos al público, sin restricciones. Pero es difícil de calcular el impacto económico definitivo de la reducción de taquillas, de abonos y de derechos televisivos.
¿Cómo está el consejo, cómo ve a los compañeros, optimistas?
Muy bien, con mucha serenidad, trabajando muy duro, cada uno en su área, colaborando mucho e intentando sumar, que es de lo que se trata en estos casos para tener un club del que todos nos sintamos orgullosos y seamos partícipes.
Se han obrado cambios en la estructura del club con nuevos ejecutivos. ¿Podría hacernos una valoración y saber si habrá más variaciones?
Era una actuación necesaria en el club organizar la dirección en dos frentes: la parte de empresa, corporativa, y la parte deportiva. Esta segunda muy necesaria porque somos un club grande, con muchos equipos en categorías inferiores, el Depor Abanca en Primera Iberdrola, un Fabril con perspectivas de formar jugadores para el primer equipo y éste que necesita crecer. Era necesaria esta persona que coordinase todos estos frentes y otra que haga lo propio en el resto del club, en la parte empresarial y de filiales.
Poniéndonos siempre en el caso de que el Depor mantiene la categoría. Han salido nombres propios para incorporarse al club como Valerón, Fran, Pandiani, Domingo Catoira...
No es el momento de hablar de nombres, es el momento de centrarnos, única y exclusivamente, en buscar la permanencia, y en ello estamos. Lo demás irá viniendo poco a poco. Unos podrán llegar, otros posiblemente no, pero de lo que se trata es de que los que vengan lo hagan para sumar y trabajar convencidos al máximo de que este proyecto es un reto muy ilusionante.
¿Cuándo se hará oficial que Richard Barral será el director deportivo para las próximas temporadas?
En la misma línea que la pregunta anterior. En estos momentos está actuando como asesor deportivo del consejo, está haciendo una magnífica labor, su trabajo en el mercado de invierno ha sido de diez porque traer jugadores de Primera División al último clasificado de Segunda hay que valorarlo y mucho. Ha hecho una labor de alquimista para construir una plantilla más equilibrada, más reforzada y con garantías para afrontar la segunda vuelta y estos once partidos que nos quedan. Cuando acabe la temporada nos sentaremos y hablaremos porque Richard es una persona muy importante para nosotros y esperemos que tenga un lugar de privilegio en el organigrama del Deportivo.
Si el equipo sigue en Segunda ¿se puede contar el año que viene con Fede Cartabia, Insua y Celso Borges? ¿Manejaría alguna ‘sorpresa’?
Todo va a depender de la capacidad económica que tengamos. La planificación en ese sentido nos queda un poco lejos porque habrá unas pérdidas económicas importantes, incluso de este propio ejercicio. Cuando hagamos toda la evaluación y tengamos datos concretos sabremos de lo que podemos disponer. Va a ser un año complicado, pero trataremos por todos los medios de paliar esta pérdida de ingresos con otros ingresos atípicos.
Precisamente hablando de afición, ¿cuál es el escenario que se plantea para los abonados en los próximos meses a nivel económico, después de la pandemia, y de acceso a Riazor?
Estamos estudiando muchas posibilidades para que la afición se sienta cómoda. Tenemos pendiente incluso una reunión cuando tengamos la hoja de ruta marcada con el tejido social del Deportivo para que nos hagan sus comentarios y generar un escenario en el que todo el mundo esté a gusto y se sienta partícipe de esto, buscando entre todos lo mejor para la entidad.