José Ángel Calabuig, natural de Sevilla, es el ejemplo perfecto del éxito que puede lograr una persona cuando no se rinde y lucha por aquello que es lo que más le gusta, en este caso el ciclismo.
El sevillano, desde muy joven, estuvo vinculado al mundo de las dos ruedas: “Yo empecé a practicar ciclismo hace mucho tiempo, incluso llegué a competir a nivel provincial en mi Sevilla”, comienza.
Con el paso del tiempo, el amor le llevó hacia el norte de España, concretamente a Coruña.
Es en la ciudad herculina donde Ángel desarrolló su visión empresarial para el ciclismo. “Cuando me vine para Coruña, en el año 2004, monté una distribuidora y una tienda online de material que era un poco especial y difícil de conseguir”, explica.
Una vez creada la distribuidora, el sevillano tenía en mente fundar su propia marca personal de creación de bicicletas pero había un problema. Y es que no tenía “formación para fabricar, entonces fui buscando cursos de soldadura, de ‘composites’ –materiales sintéticos como el carbono–... por lo que me fui introduciendo poco a poco en el mundo de la fabricación” indica.
Angel Cycle Works
Con mucho ganas por aprender y seguir avanzando, Ángel empezó “fabricando algunas cosas para amigos pero poco a poco se fue convirtiendo en mi profesión”, asevera.
Fruto de eso, surgió Angel Cycle Works, la tienda en la que está trabajando. Allí se dedican a hacer bicicletas para “aquellos que tienen un tienen un nivel adquisitivo alto, que tienen una cultura de la bici distinta y que buscan algo diferente y especial”.
En la tienda, situada en la calle O Barbanza de Oleiros, trabajan, junto a los dos socios, dos ingenieros, un mecánico y un soldador.
A lo largo de la historia de la tienda han estado empleando diferentes materiales para la fabricación de la bicicletas.
“La evolución fue la siguiente: empezamos con el acero, luego nos pasamos al titanio y después al carbono”, explica Ángel, pero añade que “con este último dejamos de trabajar hace dos años porque el carbono actual no es reciclable y si quieres utilizarlo requiere un proceso muy costoso y no hay nadie que lo haga”, afirma.
Una vez descartado el carbono como el elemento a emplear para producir las bicicletas, “decidimos centrarnos en en el titanio, porque es más noble, reciclable y duradero en el tiempo”, asevera.
Con todo, todavía planea un nuevo cambio de componente: “Estamos trabajando con el Centro Tecnológico de Barcelona para desarrollar ‘composites’ termoplásticos porque son reciclables y más sostenibles que el carbono actual”, desvela el fabricante
Poco reconocimiento
A pesar de su gran desempeño, Angel Cycle Works no ha trabajado con ningún ciclista o equipo profesional o semiprofesional debido a que “en el mundo de la carretera, los patrocinadores son los que pagan para que los ciclistas lleven el material aunque no sea tan bueno como otros”, indica.
A pesar de no trabajar con equipos profesionales, sí que lo hacen con otras disciplinas como el triatlón o las ultratrails, carreras de fondo para ciclistas.
Pero este hecho no les afecta porque, como dice Ángel con una sonrisa, “cada vez estamos más reconocidos a nivel nacional aunque quede mucho camino”.
“En España todavía no hay una cultura de bicicleta como la que hay en los países centroeuropeos” a lo que añade que “poco a poco está llegando ese reconocimiento por las cosas artesanales y lo hecho a medida”.
En cuanto al futuro, Ángel indica que “la idea es conseguir más proyección a nivel internacional porque aún estamos restringidos al mercado nacional. Pero nos gustaría desarrollar campañas en Asia, Estados Unidos y Europa”.