El pabellón de Les Comes acoge esta noche el duelo en la cumbre de la OK Liga, los dos únicos equipos que cuentan por victorias los cinco partidos disputados. Solo puede quedar uno, o no, aunque un empate mantendría al Deportivo Liceo en el liderato por mejor diferencia de goles que el Igualada.
Un Igualada que perdió a Oriol Vives y solo ha fichado a un secundario, Marc Palau. La escuadra que dirige Francesc Linares sigue moviéndose al ritmo que marca su ‘Big Four’, el meta Eladi Deitg y los ‘killers’ Jordi Méndez (con 12 goles encabeza el ránking liguero), Ton Baliu (6) y Sergi Pla (4), con Roger Bars (3) como sexto hombre de lujo, ausente hoy por lesión, mientras que en las filas verdiblancas es duda Roberto di Benedetto, por un fuerte golpe en un tobillo.
Entre Méndez, Baliu y Pla suman 22 de los 28 tantos que ha anotado hasta ahora el equipo azulgrana. El pasado curso registraron entre los tres 65 de los 99. Once aportó el ausente Oriol Vives y nueve César Vives, otro de los hombres a tener en cuenta.
El actual ‘B3’ tiene al Igualada como conjunto más anotador de la OK Liga, con 28 dianas, tres más que un Liceo algo atascado en ataque en los últimos compromisos, ambos resueltos por el mismo marcador, 2-1, en la pista del Calafell y en Riazor contra el Lleida. Por el contrario, los de Juan Copa son la mejor defensa, con solo cinco tantos recibidos, tres veces menos que su rival de hoy.
Así pues, el trabajo colectivo de los verdiblancos y las sensacionales prestaciones de Carles Grau bajo palos se antojan instrumentales para parar los pies al desinhibido Igualada, que sin Bars ve mermada su rotación. Otro aspecto importante será el estado físico del Liceo, que afronta su tercer partido –dos a domicilio– en los últimos siete días y que el miércoles ante el Lleida dio síntomas de fatiga.
En resumen, ataque contra defensa en Les Comes. Un duelo de la jornada más importante de cara a la moral que a la clasificación en una campaña donde el buen trabajo en la fase regular puede venirse abajo en los playoffs.