Hace unos días, en su presentación, el griego Lampropoulos aseguraba que el Deportivo estaría ahora en Primera si Álex Bergantiños hubiera jugado el partido de Mallorca, donde no pudo estar disponible tras haber sufrido una rotura del labio en el choque de ida de la eliminatoria con los baleares. Ayer, el capitán compareció por primera vez en rueda de prensa después de su operación. Da carpetazo al pasado y piensa en lo que viene. Pide humildad, paciencia y trabajo.
1 Su estado
Bergantiños ya es uno más en el grupo. “Estoy bien, todavía con alguna secuela y alguna molestia interna que va a ir para algún tiempo, pero por lo menos lo principal es que puedo hacer vida normal, comer, entrenar, e irme quitando también el miedo en los saltos y demás acciones. Apenas tengo molestias, la inflamación del músculo que pueda sentir en algún momento, pero ya digo que me permite entrenar y ponerme en forma, que es lo importante a estas alturas”, declaró el mediocentro deportivista, que participó en la inauguración de la nueva Deportienda en la calle Real.
2 Capítulo pasado
Atrás queda la frustración por no haber conseguido el ascenso. El Deportivo desperdició en Palma una renta de dos goles y se quedó en Segunda División cuando ya se veía en Primera tras una irregular temporada en la que, como explicó el propio Bergantiños, incluso estuvo a punto de no meterse en el playoff.
“Fue durísimo, el peor final posible para todos, el llegar con ventaja al último partido y que se nos escapara así después de un año tan largo y con tantas emociones. Fue muy duro y, como todo en esta vida, solo vale el presente, afrontar lo que viene y que sirva de aprendizaje para los que vivimos este tipo de situaciones”, apuntó.
¿Y qué aprendió? “Que es difícil y cada año es distinto. El año pasado teníamos una plantilla muy amplia, capacidad económica superior a otros, y al final tuvimos que jugarnos todo en un playoff que casi ni llegamos a jugar. Creo que tenemos que tener respeto máximo a la categoría desde el club, la afición, los jugadores... saber qué implica Segunda División, cómo de igualada es, y tener paciencia porque al final el año pasado dio tiempo a todo, a vernos como equipo de ascenso directo en la primera vuelta, a vernos casi fuera de playoff, o a vernos ascendiendo en un playoff y perderlo en el último momento. Creo que ese es el mayor aprendizaje para todos. Hay que mantener la humildad desde el principio y trabajar”, argumentó.
Bergantiños mira adelante. “El fútbol es presente. Lógicamente los que vivimos lo del año pasado hemos tenido menos tiempo para desconectar y descansar pero ya vienen energías nuevas, un cuerpo técnico nuevo, jugadores nuevos, cada año con objetivos diferentes... Este año nos toca repetir el del año pasado. Hay que intentar hacer un grupo nuevo que crea y que esté convencido de lo que trabajemos”, declaró.
3 Igualdad máxima
El centrocampista consideró que hay “12-15 equipos” que pueden ser “candidatos” a ascender. “Dentro de la igualdad, tenemos que ser lo más ambiciosos posibles para quedar lo más arriba que podamos”, aseguró.
Además, precisó que las plantillas, también la del Deportivo, sufrirán cambios. “La Segunda División tiene una posición de debilidad por cómo funciona el mercado y puede que empieces la temporada y haya jugadores que estén dos partidos y se marchen. Es algo que debería cambiarse, que el mercado se cierre antes de que empiece la Liga. Somos todos conscientes de que va a haber muchos cambios en la plantilla y eso perjudica. Creo que todos los de Segunda estamos igual, siempre en desventaja con Primera y otros mercados y hay que adaptarse a eso y tener paciencia, ver con qué piezas contamos y adaptarse lo antes posible”, indicó.
4 Gaku, a su lado
La pareja Bergantiños-Gaku Shibasaki se perfila como titular en los planes de Anquela. “De momento es importante que ya está adaptado ahí. Ya lleva años en España y es un jugador con experiencia internacional, con humildad de querer aprender y adaptarse lo antes posible al equipo y el cuerpo técnico. Creo que esa fase la tiene sencilla porque es un chaval que habla mucho con nosotros, que está adaptado ya al país. La calidad que tiene la va a demostrar. Creo que ya está contrastada y ahora falta que el equipo se conjunte bien y que podamos ver su mejor versión aquí”, aseguró el capitán deportivista.
5 Ejemplos para lo bueno y lo malo
En las últimas temporadas no ascendieron los recién descendidos y volvieron a la élite equipos que habían caído el curso anterior, como el Granada y Osasuna. Preguntado por si eso alimenta el optimismo respecto a la posibilidad de subir, Bergantiños, siempre prudente, también recordó que otros equipos llevan años en Segunda. “Ejemplos siempre podemos encontrar en el deporte, puedes mirar al Zaragoza, que lleva muchos años y en una ciudad importantísima y un club importantísimo o puedes mirar al Granada y a Osasuna, que ascendieron. Eso dependerá de lo que haga cada equipo, de sus méritos e historia”, comentó Bergantiños.