Lo intentará en un escenario ‘maldito’ para los azulgranas, el mítico estadio de San Siro, donde no gana desde 1959, cuando derrotó a los ‘neroazzurri’ en la vuelta de los cuartos de final de la Copa de Ferias (2-4).

Desde entonces, el Barça ha cosechado tres empates y una derrota (1-3) la última vez que visitó el Guiseppe Meazza, en la ida de las semifinales de Champions de la temporada 2009-10. El resultado serviría al Inter de Mourinho para pasar a la final y, a la postre, proclamarse campeón de Europa.

Aunque Messi forma parte de la convocatoria, todavía no tiene el alta médica. El argentino se rompió el radio del brazo derecho en un partido de Liga contra el Sevilla y se le pronosticaron 3 semanas de baja.
De hecho, Ernesto Valverde se ha llevado a Milán a todos los disponibles. Una lista con 22 jugadores de la que solo se han quedado fuera los lesionados Samuel Umtiti, Thomas Vermaelen y Sergi Samper. Por tanto, es poco probable que el técnico del Barcelona haga jugar al crack de Rosario.

Con Messi lesionado, Valverde ha repetido el mismo once ante el Inter y el Real Madrid en el Camp Nou y contra el Rayo Vallecano, pero tras el discreto partido de los azulgranas en Vallecas, podría hacer algún cambio en el equipo que juegue en San Siro.

Nainggolan recuperado
El Barcelona se medirá con un Inter en gran estado de forma, que recibe a los azulgranas en San Siro tras encadenar siete victorias consecutivas en la Serie A y hacer el pleno de confianza con un 5-0 al Genoa que solo dejó buenas noticias al técnico Luciano Spalletti.

Los ‘nerazzurri’ pudieron rotar a muchos de sus titulares habituales, como el argentino Mauro Icardi, el uruguayo Matías Vecino o el ghanés Asamoah, y recuperaron además al belga Radja Nainggolan, que jugó los últimos minutos tras estar dos semanas de baja por un esguince en el tobillo.