La situación en la cabeza de la tabla de la Liga 1,2,3 no es para preocuparse pero si para ocuparse. A falta de 12 partidos (36 puntos) el Osasuna marcha destacado en cabeza con 60 puntos y ha conseguido la friolera de 16 puntos de los 18 últimos posibles, ganado todos los partidos menos un empate. Le siguen el Granada con 57 y Albacete con 53 puntos. En quinta posición se encuentra el Depor que con 52 puntos ve como temporalmente se alejan las posibilidades de alcanzar el ascenso directo. Pero hablamos de la Segunda División, una competición de altos y bajos, de idas y venidas donde una buena racha te lleva al cielo y un par de tropiezos te deja grogui. Como repito desde el inicio del calendario, esta Liga no tiene dueño y hasta que falten tres o cuatro jornadas no se sabrá el nombre de los equipos que suben a Primera ni el de quienes promocionen.
Lo importante es lograr estar ubicado entre los cinco primeros puestos para tratar de asestar el zarpazo final. Cierto es que el equipo coruñés ha dejado escapar una oportunidad de oro para consolidar sus aspiraciones. Ganar los tres últimos partidos seguidos en Riazor más los sumados con el descendido Reus supondría un salto considerable para marcar diferencias con sus rivales. En total 12 puntos que estaban al alcance de la mano y que con suerte se quedarán en siete.
Sin embargo no está el pescado vendido. Sólo hay que analizar la cantidad de líderes diferentes que ha tenido la Segunda, por cierto nunca el Depor, para ver que esta categoría es diferente.
Toca poner orden en el esquema de Natxo González, atar los cabos sueltos que por lesiones o falta de forma en algunos jugadores han padecido los blanquiazules en las últimas jornadas. Y sobre todo caminar con paso firme sin los agobios ni la presión que parece que atenaza al equipo debido a las exigencias previas que por historia tiene el Club
Quedan muchos partidos, muchos puntos, algún que otro arreón de algún equipo que parece descolocado y más de un pinchazo que entierre las opciones de algún favorito. En cualquier caso no hay que despreciar la posibilidad de disputar la promoción. Todos los caminos llevan a Roma
@pgarcia_ramos
