Después un montón de partidos sin ganar en el Abanca-Riazor el Deportivo, en el último suspiro del encuentro del lunes, sumó los tres puntos por aquello de “un penalti en el minuto final”. Fue una confrontación bien llevada en la primera parte pero menos entregado en la segunda mitad, con un puñado de errores, tanto personales como colectivos. Vamos a dejarlo ahí porque cuando ya los silbidos empezaban a sonar vino el penalti señalado por el colegiado, que bastante había perjudicado al Depor, mientras consentía más de lo previsto a los mallorquinistas.
En definitivo, una vez más, los blanquiazules apenas se salieron de su habitual sistema con los normales errores desde el banquillo, como es la tardanza en los cambios, como el de Borja Valle, uno de los más peleones del equipo, por Christian Santos. Menos mal que atrás Dani Giménez volvió a demostrar su buen estado de forma parándolo todo e imponiendo serenidad en la defensa.
Lo cierto es que el Deportivo, aunque ya no depende de sí mismo para alcanzar el “playoff” de ascenso, las opciones que le quedan dependen de otros resultados que no sean los suyos, pero sí que tiene que ganar los seis puntos que están en juego, primero el domingo en Elche y en casa ante el Córdoba en la última jornada de la Liga 123. Y, por supuesto a esperar algún ‘pinchazo’ del Mallorca y Cádiz, sobre todo los gaditanos.
Como digo, el domingo en el Martínez Valero ilicitano el Elche, al que se ganó en La Coruña por 4-0, está el primer paso importante para alcanzar el sexto puesto de la tabla, sin dejar de seguir lo que pasa en el Cádiz-Extremadura y en el Mallorca-Granada.
Claro que habrá que esperar a la última jornada, recibiendo al Córdoba, ya descendido, para tirar cohetes, especialmente si el Cádiz cede algún punto. Con este panorama y como siempre...¡Forza Depor!.
P.D: Quiero desear lo mejor al nuevo presidente deportivista Paco Zas, pero recomendarle mucha prudencia y dejarse de que “vamos a pagar la deuda entre todos” que dicho sea de paso nunca se lo oímos a Tino Fernández, - que quede claro que la deuda es del club- y por si vale de algo, lo de la continuidad del Director deportivo, Carmelo del Pozo, que se lo piense un poco más porque él fue el que trajo a casi todos los jugadores que han vestido de blanquiazules en la campaña que está a punto de finalizar y, teniendo en cuenta tanto si ascendemos como si continuamos en Segunda, pocos, muy pocos valen para representar a un centenario e histórico Deportivo. La Coruña y el deportivismo no se merecen algo así.
