Sin olvidar el susto que nos dio el atlético `Niño' Fernando Torres con su aparatosa caída tras chocar con el deportivista Álex Bergantiños, de lo que hablaré más adelante, es justo que la columna refleje lo que realmente dio de sí con el debut en el banquillo del nuevo técnico blanquiazul Pepe Mel.
¿Cuál será la varita mágica del técnico recién estrenado? Porque no cabe duda que, en poco más de 72 horas, el nuevo técnico ha logrado cambiar la filosofía del conjunto y a la vez resucitar la actitud de todos y cada uno de sus hombres, haciendo posible la consolidación de un once que se perfila de cara al final de la competición. Éste es el Deportivo por el que venía insistiendo con el anterior entrenador, con su constante cambiar las alineaciones y sin perfilarse un once garante. Pepe Mel parece que lo ha encontrado... y los jugadores respondieron.
La presión exhibida ante el Atlético de Madrid, sobre todo en la primera parte, no sólo supuso la viveza de Florin Andone para aprovecharse del error de Oblak, sino también que contagió al colectivo. Así es como hay que jugar en los próximos cuatro partidos. Ya faltan menos puntos para que se cumpla mi sueño del pasado jueves. Por si hay despistado, recordaré que ahora hay que dar paso a los otros nueve en los próximos encuentros, uno a domicilio y tres en casa.
Evidentemente el Deportivo depende de sí mismo y como tal el equipo tiene que actuar, teniendo en cuenta que todavía puede hacer algo más que el jueves. Y así ya estamos metidos de lleno en la próxima salida deportivista a El Molinón, en Gijón, para verse las caras con el Sporting, un vecino que también anda en apuros para eludir el descenso. Es ésta la décimo novena ocasión en que ambos se enfrentan en Primera con un balance bastante aceptable para los deportivistas, que ganaron en cinco ocasiones, empataron en seis y perdieron en siete.
El conjunto gijonés, que empezó de la mano de Abelardo Fernández, también cambió de entrenador no hace mucho, el catalán Joan Francesc Ferrer, más conocido por Rubi, pero sin haber mejorado mucho, ya que en su campo, El Molinón, de doce partidos de Liga disputados sólo ha ganado tres (Leganés, Osasuna y Athletic Bilbao), además de dos empates (Celta y Sevilla) y nada menos que siete derrotas (Alavés, Atlético de Madrid, Barcelona, Eibar, Real Sociedad, Valencia y Villarreal), un bajón del que debe y puede sacar provecho el cuadro herculino si acierta a marcar el ritmo que impuso ante los colchoneros madrileños el jueves. La clave es clara. Forza Depor.
P.D.- Claro que se merece un recuerdo, cuyo objetivo no es otro de hacer llegar, desde Riazor y La Coruña, al `Niño' Torres la energía suficiente para superar el gran susto que nos dio a todos cuando vimos cómo caía al chocar con Álex Bergantiños que, lo primero que hizo tras ver la situación de su colega colchonero fue rezar.
Muchos, tanto en Riazor como en La Coruña que seguían el encuentro, rezamos. Seguro que cuando el Atlético vuelva a Riazor en la próxima campaña, que el Depor se asegura en las próximas jornadas, Fernando Torres va a ser recibido con el mismo fervor que trató de insufrarle, desde la grada, la afición coruñesa cuando lo retiraban del terreno de juego en camilla. Su trayectoria futbolística y su estrecha unión a Galicia, bien se merecen ese trato diferencial después de un incidente tan espectacular y arriesgado. Hasta la próxima temporada `Niño'.
