La victoria de Senegal ante Polonia (1-2) en su debut en Rusia 2018 mantiene a la selección africana en un lugar sólo apto para tres elegidos que no conocen la derrota en una fase de grupos en toda la historia de los Mundiales: los hombres de Aliou Cissé, son junto a Gales y Alemania Democrática, los únicos que no han perdido.
El gol en propia meta de Rangel Cionek y el tanto de M’Baye Niang dieron tres puntos a un país que no sabe lo que es ceder una victoria a sus rivales antes de las eliminatorias que conducen hasta la final.
Senegal, con anterioridad, sólo disputó otro Mundial, el de Corea y Japón 2002, y en sus tres primeros partidos sumó un triunfo y dos empates. En aquel torneo, sorprendió a Francia, la vigente campeona del mundo, con una victoria por 0-1 en la que Bouba Diop marcó el único gol del encuentro.
Después, contra Dinamarca, en el segundo partido, logró empatar después de iniciar el choque con un tanto en contra de penalti obra de Jon Dahl Tomasson. Salif Diao, en el arranque de la segunda parte, mantuvo invicta a Senegal.
El conjunto africano cerró su participación en la fase de grupos de Corea y Japón con un partido espectacular frente a Uruguay en el que empataron 3-3. Senegal se puso por delante en el marcador por con una diana de penalti obra de Khalilou Fadiga y con un doblete de Diop. Sin embargo, Richard Morales, Diego Forlán y Álvaro Recoba, evitaron la derrota.
Con la victoria frente a Polonia en su estreno, Senegal es la selección invicta en una fase de grupos que más partidos ha disputado. Las otras dos que no perdieron, sólo participaron en un Mundial cada una y dejaron su marca en tres encuentros.
Tres empates
La primera de ellas fue Gales, que participó en la Copa del Mundo de Suecia 1958. El equipo que entonces lideraba el gigantón John Charles, junto a Gareth Bale el mejor jugador de la historia de su país, no perdió ni un partido.
Primero empató 1-1 con Hungría. El cuadro magiar no era el mismo que cuatro años antes, cuando se le denominaba el “Equipo de Oro” y perdió la final contra Alemania con Ferenc Puskás al frente. Apenas quedaban algunos nombres como Jozsef Bozsik o Nandor Hidegkuti y ya no era la misma selección. Sin embargo, aún tenía calidad y no pudo con Gales.
Después, el combinado de John Charles firmó otros dos empates. El primero, ante México, y el segundo, frente a Suecia, que acabaría el torneo en la tercera posición. Gales, sería eliminada por la Brasil de Pelé en cuartos de final.
Ya desaparecida
La otra selección que tampoco ha perdido en una fase de grupos ya ha desaparecido con la unificación de Alemania. Cuando estaba dividida en dos bloques, Alemania Democrática consiguió participar en el Mundial, precisamente, de Alemania 1974.
En aquella cita comenzó su andadura en el torneo con una victoria sobre Australia por 2-0 en el que marcaron Colin Curran en propia meta y Joachim Streich. Después, en el Estadio Olímpico de Berlín, firmó un empate (1-1) frente a Chile. Marcó Martin Hoffmann.
Alemania Democrática cerró su participación en la fase de grupos con un encuentro histórico ante sus vecinos de Alemania Federal. Se resolvió con un gol histórico de Juergen Sparwasser a falta de 13 minutos para el final que mantuvo la condición de invicto del cuadro germano.
En las próximas fechas, Senegal tiene un reto mayúsculo para no caerse de este curioso podium de equipos no derrotados en una fase de grupos. Tiene que enfrentarse a Japón y a Colombia y no perder para mantenerse en la historia.
