El Obradoiro acaricia la machada en el Buesa Arena
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17º-23º

El Obradoiro acaricia la machada en el Buesa Arena

El Obradoiro acaricia la machada en    el Buesa Arena
El equipo compostelano, que no pudo contar ni con Beliauskas ni con Daum, también acabó mermado por las faltas personales | David Aguilar

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El Baskonia se zafó de un combativo Obradoiro y alcanzó las 1.000 ligueras gracias un buen tercer cuarto que le permitió tomar el mando del partido.

Fue un duelo muy cerrado durante gran parte de los minutos. Los visitantes resolvieron sus importantes bajas en el juego interior –Beliauskas y Daum– con quintetos rápidos y muy móviles que pusieron en apuros a los locales.

Dos triples lanzaron a los baskonistas hacia un parcial de 8-0 en los primeros cuatro minutos de un partido al que entraron tarde los de Moncho Fernández, que cuando subieron su intensidad defensiva respondieron con un parcial que les puso por delante.

Ante la falta de efectivos en el rival para defender su zona, Dusko Ivanovic apostó por un quinteto muy alto para intentar desequilibrar una balanza que apenas cayó del lado local al finalizar el primer acto (17-15).

La circulación del Obradoiro mejoró con el paso de los minutos y recuperó el mando con un 4-13. Los gallegos manejaron ventajas entre cuatro y siete puntos, y, aunque los vitorianos reaccionaron al filo del descanso, el Obradoiro se imponía tras unos primeros 20 minutos muy serios (34-36).

Ivanovic decidió jugar sin ‘5’, y el duelo entró en un intercambio de canastas del que salieron mejor los de Santiago, cargados de confianza y con las ideas claras.

Entre Tadas Sedekerskis y Youssoupha Fall se encargaron de devolver las buenas sensaciones al Baskonia, que sufría en el dos contra dos del Obradoiro, pero tomo aire con una jugada de cuatro puntos de Luca Vildoza.

El base argentino se sumó a la reacción azulgrana. Los baskonistas obtuvieron un renta de siete puntos (62-55) que pudieron controlar en el último cuarto para hacerse con una victoria muy sufrida ante un luchador rival que llegó justo de efectivos al final del choque, ademásd de lastrado por las faltas personales.

“Hemos tenido muy pocas pérdidas pero nos ha faltado brillantez para anotar. En líneas generales el equipo ha estado muy bien y cumplimos el objetivo de ser competitivos”, resumió Moncho Fernández.

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