El italiano Giacomo Nizzolo, del equipo Dimension Data, ganó la primera etapa de la Vuelta a Burgos tras un ajustado final con Alex Aranburu (Caja Rural-Seguros RGA) que tuvo que decidirse en la foto de una llegada explosiva al Castillo de Burgos, subida de tercera categoría.
Ambos ciclistas se jugaron el triunfo de etapa. Aventajaron en 5 segundos al rumano Eduard Grosu (Delko Marsella), tercero en la meta.
La carrera comenzó con un pequeño grupo de escapados formado por cinco corredores. Primero fue Jokin Aranburu, del Fundación Euskadi, quien saltó del pelotón, y le acompañaron Roy Goldstein (Israel), Stephan Kuriyanov (Gazprom Rusvelo), Jesús Ezquerra (Burgos BH) y Diego Sevilla (Kometa).
El quinteto llegó a contar con más de seis minutos de ventaja en los primeros kilómetros, pero posteriormente, con un pelotón liderado por los equipos Movistar e Ineos, las distancias fueron reduciéndose.
El primero de los escapados en caer fue Aranburu, cazado por el pelotón dos kilómetros más tarde del cartel de 25 kilómetros a meta. Después fue Kuriyanov en la primera subida al Castillo, donde Ezquerra, coronó primero, seguido de Goldstein y Sevilla.
Una caída partió el pelotón en dos partes, pero a menos de 8 kilómetros el pelotón acabó con la aventura en solitario del combativo Ezquerra. Otra caída a kilómetro y medio de la llegada dejó fuera de carrera a Rafael Valls.
Aranburu entró muy bien colocado a la subida y rompió el grupo en la parte final, la más dura. Solo le siguieron Grosu y Nizzolo. El italiano cambió de ritmo en la última rampa y adelantó al vasco sobre la misma línea. La foto de llegada decidió el ganador.
