El ruso Vladimir Morozov tomó ventaja en el duelo que mantiene con el estadounidense Caeleb Dressel por proclamarse ‘rey’ de la velocidad de los Mundiales de piscina corta de Hangzhou (China), tras imponerse en la final de 50 metros libre.
Su triunfo culminó la excelente jornada del equipo ruso, oro en las tres finales individuales masculinas, gracias a las victorias de Kliment Kolesnikov en 100 estilos y de Evgeny Rylov en 50 espalda.
El ruso ya advirtió de sus intenciones en la final de 4x50 libre, la prueba que inició la jornada, y en la que Morozov batió por 4 centésimas a Dressel en la primera posta del relevo. Victoria parcial que, sin embargo, no sirvió para evitar que Estados Unidos se alzase con el oro con 1:21.80, récord mundial.
Morozov se tomó venganza en la final de 50 libre, en la que el aventajó en 21 centésimas a Dressel, que tuvo que conformarse con la plata.
En 50 espalda, Rilov, con 22.58, superó por 5 centésimas al estadounidense Ryan Murphy, mientras que Kolesnikov se proclamó campeón de 100 estilos con una marca de 50.66.
Un botín al que Rusia no pudo añadir un nuevo oro en 4x200 libre, tras verse superado por un sorprendente conjunto brasileño, que se alzó con el oro y un nuevo tope mundial (6:46.81).
El récord universal también adornó el triunfo de Ariarne Titmus en la final de 400 libre, en la que la joven australiana, de tan sólo 18 años, dejó sin título y sin récord mundial a la gran favorita, la china Jianjiahe Wang.
La húngara Katinka Hosszu no necesitó acercarse a su propio récord mundial para lograr su cuarto título consecutivo de 100 estilos, por delante de la japonesa Runa Imai y la jamaicana Alia Atkinson.
Completó la nomina de ganadores la holandesa Ranomi Kromowidjojo, que en ausencia de la sueca Sarah Sjöstrom, ganó la final de 50 mariposa por delante de la australiana Holly Barratt y la estadounidense Kelsi Dahlia.
Hasta semifinales
La única española en liza en la jornada de ayer, Jessica Vall, cayó eliminada en las semifinales de 100 braza, tras firmar la décima mejor marca de todas las participantes (1:05.27).
La nadadora catalana, pese a rebajar en casi medio segundo el tiempo (1:05.70) que había firmando en las series, se quedó fuera de la carrera por las medallas al concluir a 18 centésimas de la japonesa Kanako Watanabe, que cerró la lista de finalistas con un crono de 1:05.09 segundos.
