Los Raptors sobrevivieron a muchos problemas y a dos prórrogas para doblegar (118-112) a los Bucks y colocar el 1-2 en la final del Este.
Norman Powell (19 puntos), Pascal Siakam (25 y 10 rebotes) y Marc Gasol (16, 12, 7 asistencias y 5 tapones) tiraron del carro canadiense en el primer cuarto (30-21).
En el segundo comenzaron los problemas: Kawhi Leonard (36 tantos, 9 capturas y 5 pases de canasta) se dañó la rodilla derecha después de anotar en contraataque y jugó el resto del partido claramente mermado, cojeando notablemente durante algunas fases, aunque ello no le impediría ser uno de los héroes.
Los Bucks aguantaron las embestidas gracias a dos reservas, George Hill (24) y Malcolm Brogdon (20), en un día horribilis de Giannis Antetokounmpo en ataque (5 de 16 y 8 pérdidas), aunque bajó 23 rebotes –marca personal– y facilitó 7 canastas.
Tras el descanso (58-51), los de Mike Budenholzer apretaron muchas veces, pero no llegaron a ahogar hasta la segunda prórroga, cuando Hill les dio su primera renta (103-105) desde el 0-2 inicial.
Pareja letal
Y ahí surgieron Marc, con su cuarto triple y dos libres, y Leonard, con cuatro puntos, para certificar un triunfo que cerró Siakam con dos aciertos desde el 4.60: un acto de justicia poética después de errar dos a 7.4 segundos del minuto 48, tiempo suficiente para que Khris Middleton forzase el tiempo extra.
Cinco antes, los Raptors habían perdido, por faltas, a Kyle Lowry, a quien siguió Powell a 69 segundos del bocinazo. Anteto también acabaría eliminado, en su caso a los 36 segundos de la segunda prórroga, a la que se llegó tras fallar Leonard un tiro sobre la bocina, del que, al igual que Siakam, tendría redención.
El duelo entre Serge Ibaka (5 puntos, 6 rebotes, 1 robo, 1 tapón) y Nikola Mirotic (10 tantos, 5 capturas y 3 balones recuperados), que tuvieron más de un pique, lo ganó el visitante en lo individual.
Un triunfo moral y deportivamente importantísimo para los de Nick Nurse, pero que aun así deja una lectura preocupante: los Bucks pudieron ganar con una versión (muy) descafeinada de Anteto, de Middleton (9 tantos con 3 de 16 en el tiro) y de Eric Bledsoe (11 con 3 de 16).
