Rafa Nadal, Nº1 del mundo, juzgó que ganar Roland Garros sin tener en el cuadro al suizo Roger Federer (Nº2)no le restaría valor a una nueva victoria en París, que sería su undécima.
“Sería lo mismo si estuviese Roger o no. Tampoco se podía decir que una victoria de Federer cuando estaba lesionado yo o Djokovic no era bonita”, sostuvo el zurdo de Manacor, en rueda de prensa previa al comienzo, mañana, del segundo torneo de Grand Slam de la temporada.
La ausencia de Federer es “una mala noticia para el torneo, no para mí, ya que la victoria significa lo mismo”, insistió el balear, a punto de cumplir 32 años, quien cree que Djokovic es “siempre uno de los candidatos”, a pesar de los altibajos del serbio en los dos últimos años, y dijo que es demasiado pronto para hablar de una hipotética final contra él.
Rival incómodo
De su rival en primera ronda, el ucraniano Aleksandr Dolgopólov (Nº54 del mundo) aseguró que es “incómodo e imprevisible. Muchas veces es capaz de un nivel muy alto y de hacer cosas extrañas, pero es peligroso, esa es la verdad”, comentó.
Nadal también habló acerca de la mejora del porcentaje de sus restos: “No lo sé si me da tranquilidad. El saque sigue siendo muy importante porque puedo jugar así los restos más tranquilo”, subrayó.
De la nueva generación de tenistas, entre los que destacan el alemán Alexander Zverev (Nº3 mundial) y el austriaco Dominic Thiem (Nº7), Rafa reconoció que tiene “mucho talento”, pero aclaró que todavía no se puede “predecir nada” acerca de cómo evolucinarán sus carreras.
Por último, la primera raqueta de la ATP admitió que regresar a las pistas de Roland Garros “es especial”, sobre todo por saber que “aquí he sacado tantos partidos adelante”, concluyó Rafa Nadal.
