El CSKA Moscú espera tomarse hoy la revancha de la derrota en semifinales de hace un año en Belgrado, cuando cayó ante en la primera jornada de la Final Four ante un Real Madrid que acabó logrando su décima Copa de Europa.
El choque promete y se presume propicio para que los blancos sigan dándose las alegrías que viven con Pablo Laso, que busca en su ciudad natal su tercera Euroliga.
El precario estado físico en que llega Sergio Rodríguez merma a un equipo moscovita segundo en la fase regular y temible como siempre a pesar de que, en cuanto a nombres, quizás la plantilla blanca sea más profunda.
El Madrid, tercero en la fase regular pero el más contundente en cuartos de final con un inapelable 3-0 al Panathinaikos, espera mucho de la tripleta que conforman Facundo Campazzo, Sergio Llull –ya recuperado de la lesión que le tuvo más de un mes de baja– y Rudy Fernández, últimamente muy mejorado.
Pero enfrente el CSKA no se queda corto con el ‘Chacho’ acompañando a Nando de Colo y Cory Higgins, otro anotador compulsivo. Jeffery Taylor y Jaycee Carroll entre los blancos y Daniel Hackett en el equipo ruso también pueden tener mucho que decir.
Como también se presenta interesante el duelo en la zona, con el heterodoxo enfrentamiento los 221 centímetros de Walter Tavares y los 198 de Kyle Hines. Anthony Randolph y Gustavo Ayón, junto a Trey Thompkins y Felipe Reyes, apuntalan un juego interior en el que el CSKA cuenta también con Will Clyburn y los rocosos Othello Hunter, Nikita Kurbanov y Andrey Vorontsevich
En el banquillo duelo clásico entre dos técnicos relativamente jóvenes pero ya con la Euroliga en su palmarés: Laso (2) y Dimitris Itoudis (1).
