El sábado, a coruña vivirá una fiesta del fútbol con el Teresa Herrera. Y no solo por la tarde, cuando se dirimirá quiénes conquistarán las tradicionales Torres, sino también por la mañana, con la disputa de los partidos de los más pequeños.
El Mini Teresa Herrera, promovido por la AFAC, me parece una gran idea. Que jóvenes jugadores tengan la oportunidad de saltar al césped de Riazor y disputar un partido será una experiencia que nunca olvidarán. De la misma manera que personas adultas recuerdan ahora con alegría aquellos Teresa Herrera que vivieron de niños, también los protagonistas de estos partidos a medio campo vivirán una mañana especial.
Y, quién sabe, a lo mejor alguno de estos niños en el futuro estarán disputando este clásico del verano. En todo caso, lo importante es que se diviertan, que pasen un buen rato. Ya sé que muchos padres sueñan con que su hijo se convierta en una estrella del fútbol, pero de momento confórmense con verles sonreír dándole patadas a un balón.