El Atlético Arteixo se quedó con las ganas de dar un golpe encima de la mesa y afianzarse todavía más en el liderato tras el duelo directo disputado en Lino Balado ante un Sigüeiro que sufrió para sumar un punto y mantenerse en el segundo puesto a cinco puntos de los rojiblancos.
El conjunto dirigido por Juan Riveiro demostró su capacidad de adaptación y fue superior desde los primeros compases del encuentro. El Arteixo modificó su juego habitual, más combinativo y pausado, y ofreció una versión más directa que intentó castigar la defensa de cinco del Sigüeiro con diagonales largas y cambios de orientación.
El planteamiento le funcionó a los rojiblancos, que desconectaron a los locales presionando arriba, cortando la conexión con el punta y recuperando rápido los balones largos que trataba de buscar un incómodo Sigüeiro.
Además, el Arteixo tuvo las ocasiones más claras durante la primera mitad. Pablo Ramos y Taibo se encontraron con la madera de la portería local y Edu pronto se dio cuenta de que Ale Díaz estaba especialmente inspirado tras un tiro desbaratado por el portero.
En los últimos cinco minutos del primer acto, Jose tuvo que intervenir para detener una llegada del Sigüeiro.
El equipo local decidió jugar más en largo en la segunda mitad, ya con dos puntas, y adelantó la defensa para dificultar el juego del Arteixo. Lo logró en los primeros minutos pero poco a poco el cuadro rojiblanco recuperó el dominio del choque.
Edu y Vela volvieron a probar la destreza de Ale Díaz y así llegó el enfrentamiento directo al tiempo añadido, donde el Sigüeiro sí pudo hacer el 1-0 en un tiro que obligó a Jose a hacer un paradón.
No obstante, el Arteixo todavía tuvo tiempo para otra pero el gol de Bandera de cabeza fue anulado por un fuera de juego que indignó al equipo de Ponte dos Brozos.