Vuelve la OK Liga femenina con la disputa de la novena jornada. Tras las ocho anteriores, y sin partidos pendientes, ya hay una importante brecha entre los siete primeros y el resto. Cinco puntos separan al séptimo, el Igualada, del octavo, el Liceo. Así que, por ahora, las de Stanis García intentarán defender esa octava plaza que puede otorgar el billete para la Copa de la Reina.
Las coruñesas inician el 2022 a domicilio, teniendo que desplazarse una vez más a tierras catalanas. Allí les espera el antepenúltimo clasificado, el Voltregá, el sábado a partir de las 12.30 horas.
Las de Osona, con cuatro puntos, solo tienen por debajo al Vilanova (con uno) y al Girona (que aún no ha sumado), y están empatadas con el undécimo, el Sant Cugat.
Pero están solo tres por debajo de las verdiblancas, y a dos de Mataró y Las Rozas, por lo que afrontan una buena oportunidad para escalar posiciones.
El Liceo lo sabe y no está dispuesto a dejarse sorprender, a pesar de que no disputa un partido desde el 18 de diciembre, cuando derrotó en Riazor al Vilanova (4-1).
Su objetivo es dar un paso más hacia la zona noble de la clasificación y con ello alejarse de los equipos que están luchando por la permanencia.
Enero va a ser crucial en este sentido. Tras el partido en Sant Hipólit de Voltregá, las de Stanis García recibirán al Sant Cugat. Posteriormente visitarán al Girona y cerrarán el mes en Riazor frente al Igualada.
Con todo, una combinación de buenos resultados pueden hacer que el Liceo se enganche definitivamente a ese grupo de siete u ocho equipos que comande la clasificación.
Y el primer paso sería regresar esta semana de la comarca de Osona con los tres puntos en la maleta.
