Enchufados con el Ecorrally
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Imagen de la presentación del Ecorrally que se celebrará este fin de semana en varios ayuntamientos de la provincia | patricia g. fraga

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La Escudería La Coruña se ha reinventado y asume los nuevos tiempos con naturalidad y con mucha imaginación. Ayer se presentaba en las instalaciones del Sporting Club Casino la sexta edición del Ecorrally que, durante todo este fin de semana llevará a 24 coches eléctricos por varios ayuntamientos de la provincia.
 

Alberto González Naveira, presidente de la escudería herculina, destacó la enorme dificultad organizativa y presupuestaria para conseguir una zona de carga de los vehículos en una ciudad en la que, realmente, no abundan los puntos donde ‘enchufar’ el coche eléctrico.
 

No obstante, y un año más, todo está dispuesto para una prueba absolutamente exigente, como destacó José Manuel Solsona, piloto que pugna por lo más alto en el campeonato de España de esta modalidad.
Es tal la dificultad para pilotos y copilotos que la exigencia física se nota después de cada carrera. Hay dos aspectos fundamentales, no solo porque puntúan para la clasificación final, sino porque se compaginan. Uno son los tiempos, otro el consumo de electricidad.
 

Siendo una prueba que se desarrolla en tramos poblados, los vehículos tienen no solo que trazar a la perfección sobre el asfalto para no peder segundos, sino que deben regular su consumo.
 

Los deportistas acaban literalmente exhaustos porque, aunque no se trata de una prueba con velocidades altas, todo lo contrario, el estrés del pilotaje en estas circunstancias es enorme por todo lo expuesto.
 

Ernesto Rumbo, una de las personas más importantes en el mundo del motor en Galicia, destacaba precisamente todas estas metas que los pilotos deben ir superando para hacer buenas carreras. Será precisamente Ernesto el que abra la carrera con el coche ‘0’.
 

Otro de los aspectos a tener en cuenta es que pilotos y copilotos no conocen el recorrido hasta que comienzan los tramos. Se une ello a la dificultad que entraña el conseguir un equilibrio lógico entre los consumos de los vehículos y los tiempos, las velocidades a las que los coches tienen que ir. Son tiempos nuevos para todos, también para el mundo del motor.

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