El barco de Maristas seguirá contando con su timonel. Fernando Buendía continuará como entrenador principal del equipo colegial durante la temporada 2025-26, según ha hecho hoy oficial el propio club a través de redes sociales. 

Tras anunciar las cinco salidas con respecto a la temporada pasada (Nia Daniel, Solo Amusan, Lorena Lorenzo, Carlota Velasco y Laura Cervelo), Maristas ha empezado el período de anuncios de renovaciones y fichajes, empezando por Fer Buendía. El técnico sumará así su cuarta temporada consecutiva al frente del equipo. Llegó en 2022 procedente del Xiria carballés de Liga EBA para suplir la salida por motivos personales de Esther Muñiz y desde entonces se ha sentado en el banquillo colegial.

"En el momento en que el club me dice que va a intentar mantener el bloque, aunque de dinero vamos justos, en ese momento con esa muestra de esfuerzo, fue un gesto del club de ser un poquito ambiciosos y eso es lo que necesitaba para seguir. Ese cariño que dijera que lo estamos haciendo bien y que nos van a empujar", explica el preparador sobre su renovación. 
 

Éxitos

Bajo la batuta de Buendía, Maristas no ha dejado de crecer. Tras una primera temporada complicada y con pocos triunfos, las colegiales llevan dos años metiéndose en la fase de ascenso a Liga Femenina Challenge de manera consecutiva. En la 2023-24 no fueron capaces de ganar ningún partido en Utebo, pero la campaña siguiente fue totalmente distinto.

Durante la temporada 2024-25, Maristas batió su récord de victorias en una fase regular de Liga Femenina 2 con un grupo compacto y unido que mezclaba juventud y experiencia, liderado en la parcela ofensiva por Nevena Dimitrijevic, Nia Daniel y Solo Amusan. Una gran fase de liga les dio el billete para la fase de ascenso, que se celebró en Vilagarcía.

Allí empezaron ganando a Claret, pero cayeron contra Sevilla (que terminó ascendiendo) en el segundo choque. El tercer partido de fase de grupos fue espectacular. Las colegiales remontaron un duelo a vida o muerte que parecía perdido contra Mataró y se citaron con Logroño en una de las finales por el ascenso a Challenge. El cansancio acumulado y los problemas físicos mermaron a Maristas, que se cayó en los minutos finales de ese partido y las riojanas fueron quienes subieron.

No se pudo lograr el ascenso, pero el equipo demostró que tiene nivel para competir en la liga de la mano de un entrenador que seguirá al frente del proyecto un año más. Además, esa fase fe ascenso sirvió para crear (aún) más comunión con la afición, que se desplazó en masa a Vilagarcía para animar a su equipo.