El Deportivo Abanca ya tiene bestia negra. Se llama Granadilla Tenerife y en tres partidos siempre le ha puesto en muchos problemas. En el Trofeo Teresa Herrera le goleó en Riazor, un partido clave para la evolución de las blanquiazules, en la tercera jornada le empató en Abegondo y el domingo le volvió a golear, esta vez en Tenerife, con errores defensivos que se repitieron desde el principio hasta el final del partido.
1. Problemas para defender los espacios
Los primeros 20 minutos de partido fueron una tortura para Laura, novedad en el once inicial, Villegas, desplazada al lateral, María Méndez y Misa. Ninguna de las tres defensas fue capaz de contener a la delantera local Martín Prieto, referencia de su equipo en los balones a la espalda de la zaga deportivista. Misa mantuvo la portería a cero con varias intervenciones de mérito.
Ni siquiera intercambiando sus posiciones en el corazón de la retaguardia –María pasó al perfil izquierdo y Laura al derecho– lograron contener a la ‘nueve’ del Granadilla, que no dejó de insistir hasta marcar un gol –anulado– y provocar otro –en propia de Villegas–.
2. Falta de fluidez en el ataque posicional
El Depor Abanca tampoco estuvo fino en el ataque posicional. En la primera mitad le costó hilvanar dos o tres pases seguidos, quizá por el estado del césped –sintético de pobre calidad– o por el carácter combativo de un rival que apretó en la zona de creación blanquiazul y le discutió la pelota con la inspiración de sus mejores peloteras: Eva Llamas y Silvia Doblado.
Rindieron por debajo de su nivel habitual dos de las jugadoras más importantes en la circulación de balón para el equipo coruñés: Teresa, que volvía al once inicial después de dos partidos como suplente, y Gaby, por segunda jornada consecutiva gris en el juego de asociación.
3. Maya y Kika crecen con la confianza
La japonesa Maya, que salió como titular por tercer partido seguido, y la venezolana, Kika, muy activa desde su entrada en el campo pese a volver a la suplencia, parecen haber crecido con la confianza que les ha dado Manu Sánchez en los últimos partidos.
La ‘17’ marcó el 1-1 con un remate en el área llegando desde segunda línea y la ‘10’ firmó el 5-3 con una precisa y preciosa rosca de interior desde la frontal que clavó muy cerca de la escuadra. Ambas suman ya dos goles en su cuenta particular y atraviesan un buen momento personal.
4. Falta de atención en los balones parados
El ataque y la defensa del balón parado son dos de las claves del buen rendimiento blanquiazul en Primera. El domingo, sin embargo, los tres goles de María José llegaron en tres jugadas de estrategia marcadas por la desconexión de la zaga y en situaciones de remate muy cómodas para la delantera.
