Gaby: “Alguna vez pensé en abandonar, me sentía un poco sola”
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Gaby: “Alguna vez pensé en abandonar, me sentía un poco sola”

Gaby: “Alguna vez pensé  en abandonar, me sentía un poco sola”

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Gabriela Antonia García Segura (2 de abril de 1997 – Tunapuí, Venezuela) es Gaby, la máxima goleadora del Depor Abanca en Primera Iberdrola. Indiscutible en el once inicial blanquiazul, lo ha jugado todo y suma nueve tantos pese a que Manu Sánchez ha retrasado su posición en el campo, de la delantera a la mediapunta. La internacional venezolana llama la atención por su envergadura y aires desgarbados. Con la pelota brilla en el juego de asociación y, sin ella, por su capacidad de sacrificio.

Antaño muy tímida y reservada, ha ganado en confianza desde que llegó a Coruña y habla con más naturalidad y personalidad, incluso el día que menos le apetece, después de un mal partido contra el Athletic y tres seguidos sin ver portería. Su sequía ha coincidido con el peor momento del equipo, Gaby hace autocrítica y mira hacia delante, como hizo cuando dejó su casa y su familia por el sueño de convertirse en futbolista profesional.

Primera derrota en Abegondo, ¿cómo os ha sentado?
Es difícil perder en casa porque la fanaticada siempre nos da un plus más. Nos duele, pero tenemos que seguir trabajando para mejorar. Estos días de descanso nos van a venir bien para despejarnos un poco y verlo de otra manera (la plantilla regresa a los entrenamientos después de tres días de permiso).

Dos derrotas seguidas, ¿qué ha pasado?
En estos últimos partidos nos ha costado un poco más hacer nuestro fútbol, tener y mover la pelota de un lado al otro. Sin el balón no somos capaces de hacer nuestro juego, tenemos que correr más y eso nos complica la idea. Tenemos que volver a retomarla para recuperar nuestro ritmo.

¿Notas que los rivales os conocen más?
Puede ser que nos estén estudiando un poco más, pero estos resultados dependen más de nosotras. Hemos perdido el cariño hacia la pelota, en los últimos partidos nos deshacemos de ella más rápido y usamos el pelotazo.

¿Puede ser que os hayáis relajado inconscientemente al conseguir el objetivo de la permanencia?
No creo que sea relajación porque en el vestuario ya nos hemos puesto otros objetivos. Queremos demostrar que lo que venimos haciendo desde la primera vuelta no era casualidad y queremos seguir en los primeros puestos.

Manu ha dicho públicamente que os falta frescura, ¿notas el cansancio?
Hay partidos que termino más cansada, pero es algo normal por el trabajo que tengo que hacer, por la exigencia de esta categoría y porque la liga es larga.

Has pasado de la delantera a la mediapunta, ¿cómo te has adaptado al cambio?
Al principio me costó un poco porque no estaba acostumbrada a tener tanto recorrido y ayudar en la defensa, pero ahora me siento más cómoda y ya forma parte de mi trabajo. Creo que es la posición más adecuada para mí porque estoy más en contacto con la pelota y me da la oportunidad de sorprender llegando desde atrás y hacer muchos goles. Es verdad que me exige mucho más y que tengo que seguir mejorando para aportar más cosas al equipo.

En los últimos partidos hemos perdido el cariño hacia la pelota, nos deshacemos de ella más rápido

¿Ya piensas en el Valencia o todavía te acuerdas del Athletic?
Siempre le doy vueltas al partido anterior y lo uso para pensar en el siguiente. No fue uno de mis mejores partidos ni estuve acertada. Tengo que ser consciente de mis errores y seguir trabajando.

¿Eres consciente de cuales son esos fallos?
Manu hace mucho trabajo de vídeo con nosotras. Al principio me lo tomaba mal, pero es positivo que nos muestre dónde fallamos para tratar de no repetirlos.

Hasta ahora os había salido casi todo bien, ¿es fácil venirse arriba?
No le hago mucho caso a los halagos ni a las críticas. Cuando las cosas salen bien solo traen rosas, pero cuando no salen tan bien aparecen los comentarios negativos. En el fútbol no hay memoria.

Por fin un partido oficial en Riazor, ¿qué sensaciones tienes?
Ya hemos jugado varias veces, pero esto va a ser un escenario diferente, algo distinto. Creo que va a ser muy bonito jugar en un estadio como Riazor, tan importante y con esa historia. Esperemos que haya bastante gente para que nos den su calor y que nosotras podamos recompensarles.

Cuando las cosas salen bien solo traen rosas, pero cuando no salen tan bien aparecen los comentarios negativos

En la Copa de la Reina es ganar o irse a casa, ¿qué esperas del partido?
Tenemos que exigirnos mucho más que en los últimos partidos si queremos seguir adelante. Es una competición nueva y contra un rival que no será fácil.

Otra competición nueva, ¿qué sueños te faltan por cumplir?
Todavía soy joven y me quedan muchas cosas por vivir. Me gustaría jugar algún día la Champions y un Mundial absoluto.

¿Te consideras una de las fijas en la selección?
Con la nueva seleccionadora no hay nadie fija. Tengo que seguir trabajando y aprovechar cada oportunidad que me den. 

En Venezuela te apodaron la muda, ¿por qué?
Siempre me ha costado hacer grupo. A veces quiero hablar, pero no me nacen las cosas que me gustaría decir. En la selección me decían la muda porque no abría la boca. Aquí tampoco, ni en los entrenamientos, ni en el vestuario, ni en los pasillos… Me desahogaba cuando llegaba a casa y lo hablaba todo con Kika.

¿Es Kika tu apoyo más importante aquí?
Si no hubiese venido con ella creo que ya estaría de vuelta en Venezuela. Nos ayudamos mucho para adaptarnos lo más rápido posible.

Siempre me ha costado hacer grupo, a veces quiero hablar pero no me nacen las cosas que me gustaría decir

¿Alguna vez se te pasó por la cabeza dejar el Depor?
Alguna vez pensé en abandonar porque me sentía un poco sola, sobre todo al principio. Nunca había estado tanto tiempo y tan lejos de mi casa y mi familia. La adaptación fue dura, pero ha valido la pena.

¿Ayudar a tu familia supone un extra de presión?
Tal y como está la situación en mi país tengo que ayudarles, pero no es una presión, es una motivación más. Es un pago por todo el apoyo, el cariño y las palabras de aliento que me dan cada semana.

Esta temporada os sigue mucha más gente, ¿cómo llevas la popularidad?
Ahora me conocen mucho más y, a veces, me paran por la calle para pedirme una foto, una firma o para preguntarme qué tal el último partido o cuantos goles voy a marcar en el siguiente. Me da un poco de vergüenza, pero es algo en lo que también tengo que trabajar. Es bonito que las personas valoren nuestro trabajo y esfuerzo.

Es parte del crecimiento fútbol femenino.
El cambio ha sido brutal desde que ascendimos. Antes solo salíamos en los periódicos de A Coruña y ahora,nos televisan cada fin de semana. Se nota que el fútbol femenino es cada vez más visible y esperemos que siga siendo así o más.

Falta la firma del dichoso convenio, ¿cómo te lo tomas?
Creo que tenemos que apretar un poco más para que se terminen de concretar las cosas (esta entrevista se celebró antes del ultimatum de las jugadoras y la AFE).

Tengo contrato por un año más con el Deportivo y estaría encantada de seguir por muchos más
El pasado 30 de enero se cumplieron tres años del fichaje de las venezolanas Gaby y Kika por el Depor Abanca y el próximo miércoles 12 se cumplirá el tercer aniversario de su debut, en un partido de Segunda División contra el Monte cántabro en Arteixo. Desde entonces, la delantera ha evolucionado como futbolista y ha saltado a la primera línea del fútbol femenino, despertando el interés de grandes clubes europeos, como el Benfica.

Tus goles y tu rol en el Depor llaman la atención de otros equipos, ¿dónde está tu futuro?
Tengo contrato por un año más con el Deportivo y estaría encantada de seguir por muchos más. Desde que llegué me han tratado súper bien, me hacen sentir como en casa y estoy feliz.

¿Cómo has cambiado desde que llegaste a Coruña?
Como futbolista he ganado mucha experiencia y he cambiado mucho por la posición y por la forma de jugar. Antes era una delantera de correr más y no tenía esa sensación de jugar con la pelota. Ahora soy como una centrocampista, la busco, la entrego y la toco mucho más.

¿Y personalmente?
He madurado y ahora veo las cosas con otra perspectiva. Antes solo pensaba en jugar y ahora me centro un poco más en el día a día y en mi futuro. El fútbol ya es un trabajo para mí, ha valido la pena esforzarme tanto para ayudar a mi familia y hacer una vida aquí, tener mis propias cosas.

Gaby: “Alguna vez pensé en abandonar, me sentía un poco sola”

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