Estefanía Pabst Fernández (México DF, 1992) es una voz autorizada en el vestuario del Depor. Una de las capitanas y máxima goleadora la pasada temporada, el domingo fue titular en el debut blanquiazul y anotó su primer tanto del curso en la victoria sobre el Gijón FF a domicilio (0-7). Por ahora no piensa en el título o el ascenso, los grandes objetivos del club, ni en el 'pichichi', aunque reconoce que le haría ilusión repetirlo. Estefi habla de presente y futuro en clave blanquiazul mientras prepara su vida laboral en el ámbito de las impresiones 3D.
Un 0-7 para empezar, ¿tan fácil como parece?
Sabíamos que nos enfrentábamos a un rival con un campo complicado y estuvimos toda la semana preparando el sistema de juego adecuado. Nos costó marcar el primer gol. A partir de ahí supimos por dónde salir. Vamos a tener rivales más complicados, no vamos a ir tan sobradas y, espero equivocarme, nos llevaremos alguna sorpresa.
El Matamá, uno de los equipos que os sorprendió y os ganó la temporada pasada, visita Arteixo el próximo domingo.
Sí, ya nos lo puso difícil en su casa, en un campo pequeño. Había gente detrás que nos había estudiado. Este año se ha reforzado con buenas jugadoras y tiene nuevo entrenador. Seguro que ya sabe cómo jugarnos y no creo que se dé el mismo resultado de Gijón.
Los rivales os estudian, ¿es un hándicap ser el favorito?
El año pasado partimos como un equipo nuevo, nadie sabía cuáles eran nuestros puntos fuertes. Desde que nos convertimos en un favorito somos el equipo más estudiado. Es fácil fijarse en qué hacemos o qué sistemas utilizamos por vídeos a través de las redes sociales. Los rivales tienen la lección aprendida.
Sería un orgullo jugar en la selección mexicana, es la de mi país
En Gijón, Manu Sánchez apostó por un 3-5-2 con cuatro delanteras en el once, ¿crees que se repetirá durante la temporada?
Es un sistema parecido al que ya utilizamos en Tordoia en la pretemporada. En un campo muy pequeño, con tres defensas era difícil que nos creasen complicaciones. Orientó el juego hacia un ataque con más jugadoras para que fuese más fácil hacer gol. Al principio tiraban la línea muy arriba, pero funcionó. El sistema dependerá de cada partido y cada rival.
El presidente ha declarado públicamente que el objetivo es el ascenso, ¿más presión para el vestuario?
Es pronto para decirlo, pero creo que ahora mismo no sentimos esa presión. La temporada pasada ya estuvimos muy cerca de conseguir el objetivo. Pecamos de falta de experiencia, no tanto a nivel individual, sino por vernos en una situación en la que la mayoría de las jugadoras nunca habíamos estado. Para mi gusto lo hicimos muy bien. Ahora no nos vale repetir el mismo puesto que el año pasado. Para eso nos hemos reforzado y hemos aumentado un día más el número de entrenamientos por semana. Se nota un carácter todavía más profesional.
Los fichajes han aumentado la competencia, ¿te sientes menos indiscutible?
No son competencia, son compañeras. Cada una de nosotras tiene características que la otra no tiene y que sirven para diferentes tipos de situaciones y partidos. Creo que cada una va a tener su momento. Es cierto que tenemos que pelear por el puesto en cada entrenamiento y cada partido, nadie se lo tiene ganado y hay que aprovechar cada minuto que tengamos sobre el campo.
¿Crees que podrás volver a ser la máxima goleadora del grupo?
La pasada temporada no se me pasó por la cabeza ser 'pichichi' en ningún momento hasta que vi que era posible. No era un objetivo ni una obsesión y este año tampoco lo será, pero sería bonito repetirlo.
¿Sueñas con vestir algún día la camiseta de la selección mexicana?
El año pasado me encontraba con el apoyo en las redes sociales y tenía mensajes de gente que me preguntaba por mi interés después de cada partido, pero nunca directamente de la Federación Mexicana. Sería un orgullo jugar en la selección. México es mi país, sigo teniendo familia allí y hablo a diario con ellos.
En el Depor he vivido situaciones que me van a ayudar para toda la vida
Ha pasado algo más de un año desde que juegas en el Deportivo, ¿en qué te ha cambiado?
Futbolísticamente me ha aportado muchísimo nunca había estado rodeada de gente tan buena en el mismo equipo. A nivel individual, me encuentro haciendo cosas que antes me parecían impensables. Me lo dicen desde fuera y me siento satisfecha al comprobar que, tengo margen de mejora.
¿Y a nivel personal?
He vivido muchísimas experiencias que son casi obligatorias para casi cualquier persona. Es difícil enfrentarse, a nuestra edad, a situaciones de tanta intensidad como a las que nos hemos enfrentado y nos vamos a enfrentar, no solo de alegría, sino algunas más complicadas. Me servirán, en un futuro, para salir adelante.
¿Cuáles son esas situaciones difíciles?
Una de las situaciones más complicadas que vivimos el año pasado a nivel grupal fue el partido en Oviedo. Todo lo que rodeó ese fin de semana lo vivimos como una experiencia brutal. La derrota fue un palo, pero sirvió para unirnos más. Es un ejemplo claro de cómo sobreponerse a situaciones que me van a ayudar no solo a nivel deportivo, sino para toda la vida.
