Nada hacía presagiar que el Ural, debutante en División de Honor Juvenil, llegaría al derbi coruñés de la segunda vuelta por encima del Deportivo, el gran referente del fútbol base herculino. Solo un punto separa a los dos equipos el día del segundo derbi en la máxima categoría del fútbol formativo nacional. Un día de fiesta.
El Ural es la gran sensación de la temporada hasta el momento. Apoyado en la brillante generación del 2000 y en varias incorporaciones que han elevado el nivel de la plantilla, el equipo de Diego Armando García no parece un novato en la categoría, sino un equipo experimentado y con mimbres para soñar.
¿Y cuál es el sueño de un modesto equipo de barrio? Acabar la temporada por encima del Depor y, siendo todavípa más ambiciosos, lograr una plaza para jugar la Copa del Rey. El primero, lo tiene en su mano, el segundo, es una mera ilusión.
La gran campaña del Ural en su estreno en División de Honor pasa por sus números como local. Es el tercer mejor equipo en su campo, aunque ha jugado en dos, en A Grela 1 (el escenario de hoy) y en Elviña.
Seis victorias, un empate y dos derrotas ilustran los números del equipo verde delante de su público. Y entre los triunfos, uno por encima de todos, el que consiguió hace solo dos jornadas contra el imbatible Celta.
El golpe moral de ganarle al líder aún le dura a los coruñeses, que la semana pasada vencieron al Roces a domicilio y hoy ante el Depor persiguen alcanzar la tercera seguida, algo que todavía no han logrado en este curso.
Para ello, Diego García cuenta con toda la plantilla a su disposición a excepción de Gamallo, que se recupera de una lesión de larga duración y aún no ha podido debutar en la máxima categoría. Enfrente, el Depor tiene las bajas de Óscar Lorenzo, lesionado, y Valín, convocado por el Fabril, pero sí podrá contar con el central Mujaid, que ya ha disputado los últimos partidos pese a empezar la temporada con el filial.
El equipo de Javi Álvarez atraviesa una temporada discreta para la exigencia del Deportivo, con muchos altibajos en el juego y en los resultados. Y esa irregularidad se refleja perfectamente fuera de casa, donde suma tres victorias, tres empates y tres derrotas, la última hace solo dos semanas en Cantabria ante el Perines.
El precedente de la primera vuelta favorece a los blanquiazules, que se llevaron el derbi con un 3-1 en Abegondo, pero el partido de hoy será otra historia. Algo más que un derbi coruñés.
