Al Liceo no le esperaba un encuentro sencillo en el pabellón de Torrelavit, donde esta temporada juega el Noia. Y no lo fue. Los dos equipos se emplearon a fondo, con 34 faltas en total (15 señaladas a los locales y las restantes 19 a los visitantes). Pero una vez más, el Liceo ganó, mantiene el pleno de puntos y llega a las nueve victorias seguidas.
Un triunfo que empezó a forjarse en el minuto 7, gracias a que Dava Torres inauguró el marcador (0-1).
Ya desde los instantes iniciales el ritmo de faltas e interrupciones fue alto. Solo habían transcurrido 16 minutos y el Liceo ya acumulaba 10. Menos mal que la directa, que lanzó Pujadas, no entró. Pero poco después le tocaba el turno al Liceo, y Adroher tampoco convirtió. Sí lo hizo en el 20 Dava Torres. Y con el 2-0 se llegó al descanso.
En la segunda parte, el último cuarto de hora de partido estuvo lleno de interrupciones. Pol Manrubia sufrió una tarjeta azul en el minuto 35, y Adroher falló la falta directa. En el 37, cambio de papeles, azul y Maxi Oruste y Manrubia, ya de vuelta en la cancha, erró de nuevo ante Carles Grau.
Sin embargo, a falta de cinco minutos Ballart colocó el 1-2 en el marcador.
Pero ahí apareció la calidad y la experiencia de Adoher, que a la tercera falta directa no falló (1-3, minuto 47). Y mejor se pusieron las cosas cuando poco después el entrenador del Noia, Ferrán López, fue sancionado con tarjeta azul.
Aunque el Liceo no aprovechó la superioridad numérica, los minutos pasaron y el partido concluyó. No sin antes Franco Platero poner, de falta directa, el definitivo 1-4 dos segundos antes del sonido de la bocina. El Liceo volverá a jugar en Riazor el viernes (20.45 horas), contra el Girona.
