Ayer se celebró una nueva edición de la Carrera Alternativa, la vigésimo cuarta. Un evento que ha vivido todo tipo de experiencias con la climatología. Pero después de que el año pasado cayera mucha agua, esta vez el tiempo se portó. Sol y temperatura agradable para los cientos de coruñeses de todas las edades que ayer se concentraron, a las once de la mañana, en la plaza de María Pita.
Y seguro que a muchos lo primero que les extrañó fue no ver a Fernando Romay dando el pistoletazo de salida. En esta ocasión, el exbaloncestista no pudo asistir a la Carrera Alternativa. Circunstancia que le dio a la atleta Paula Iglesias la oportunidad de dar la salida.
A partir de ahí, los participantes realizaron un recorrido de siete kilómetros. Cada uno a su ritmo y con la libertad para elegir la manera de hacerlo: andando, corriendo, en patines, en bicicleta, en silla de ruedas...
Poco a poco los deportistas fueron llegando de nuevo a María Pita y allí les esperaban numerosas zonas para seguir haciendo ejercicio.
En definitiva, un éxito de participación y organización de una de las pruebas deportivas populares con más solera de la ciudad.
La organización ya está pensando en la edición del año que viene, que será muy especial, pues la Carrera Alternativa llegará a su vigésimo quinta entrega.
