El viernes se celebrará una nueva edición de un partido que en las últimas temporadas se ha convertido en un clásico. El llamado `derbi romano' o, lo que es lo mismo, el Breogán de Lugo-Basquet Coruña, promete emoción, teniendo como protagonistas a dos equipos de la zona alta de la tabla, y con ello aspirantes a las eliminatorias de ascenso.
Los lucenses ya tienen ganas de derrotar a un equipo que, entrenado por uno de sus mitos (Tito Díaz), no le trae buenos recuerdos. Los herculinos eliminaron el año pasado de los playoffs al Breogán. Y esta temporada, en el choque de la primera vuelta, los naranjas volvieron a cantar victoria (94-85).
Eso sí, en la clasificación provisional tras 28 partidos, el Breogán está por delante del Basquet Coruña. Quinto y sexto, por lo que, si así hubiese terminado la fase regular, se volverían a ver las caras, pero esta vez con el factor cancha a favor de los celestes. El equipo lucense ya ha sumado 18 triunfos, y está empatado con el cuarto, Oviedo. Pero ahí cerca anda el cuadro coruñés, con 17, y con muchas ganas de subir el mayor número de posiciones posible en los seis partidos que faltan todavía por disputar antes de los playoffs.
Se puede decir que los dos equipos llegan en un buen momento de forma. El Breogán con su bloque mucho más compactado que en la primera vuelta, y el Basquet Coruña habiendo superado la marcha de Dago Peña con dos novedades que ya han dado alegrías y que prometen más, Justin Johnson y Kyle Rowley.
También será una fiesta del baloncesto gallego. Si en la primera vuelta había bastante equilibrio en las gradas del Palacio de Riazor, en esta ocasión los aficionados breoganistas serán mayoría, algo que intentará el anfitrión para sumar una nueva victoria. Eso sí, sabe que el visitante le va a poner las cosas muy difíciles, en un partido vital para ambos.
