El entrenador del Santiago Futsal, Santi Valladares, comunicó en una rueda de prensa en el Multiusos Fontes do Sar que no seguirá al frente del equipo compostelano la próxima temporada.
El técnico empezó diciendo que “tras quince años en el club, y siete como primer entrenador, quiero comunicaros que no continuaré la temporada que viene. Todo tiene su fin y aunque éste no es el que en principio suponía, ni en tiempo ni en forma, pero a veces las cosas no siempre salen como uno desearía”.
El preparador reconoció que “para mi es una decisión triste y dura, pero por otra parte muy meditada por razones suficientemente importantes para decir”.
Valladares argumentó que “durante estos siete últimos años, como es sabido por todos, el club ha pasado por distintos avatares pero había comunión y comunicación entre el presidente y el director general conmigo, como responsable máximo de la parcela deportiva. Entre todos, y apretando los dientes a base de transparencia y confianza, aunque manteniendo los problemas económicos, se iba tirando. Pues bien, desde hace un tiempo para acá esa confianza que yo tenía en el presidente iba desapareciendo, siendo este año la gota que colmó el vaso y como consecuencia nuestra relación personal se fue deteriorando”.
Santi Valladares siguió explicando los motivos que le han llevado a tomar la decisión.
“Como cualquier club o empresa que tiene retrasos o impagos en las nóminas lo mínimo que se puede hacer es dar explicaciones tantas veces como haga falta y sin que nadie te las pida y así las personas que conforman el club sigan confiando. No se puede dar la callada por respuesta día tras día y mes tras mes durante tanto tiempo y eso es lo que lleva sucediendo en el club”.
Relación no correcta
El estratega de Padrón considera que su relación con la cúpula de la entidad ha cambiado en los últimos tiempos.
“La relación con las dos personas que dirigen el club (Ramón García –presidente– y Miguel Fernández –director general–) no es la que venía siendo habitualmente, no es la correcta, o por lo menos la que yo desearía. La relación con Ramón, aunque es cordial ya que ambos somos personas educadas, no es buena, por lo menos desde mi punto de vista”.
Santi Valladares acabó su intervención lamentando la situación actual de la sociedad celeste ya que “llega un momento en el que se entra en una dinámica del vale todo, absolutamente todo, y nos dejamos llevar por una inercia que no va a buen puerto. Se olvidan los pequeños detalles, innumerables, de los cuales podríamos estar hablando hasta mañana y eso no es bueno.
Cuantas veces y cuantas personas se lo habíamos comentado y poco o nada se ha mejorado en este aspecto. Este club contó, y cuenta, con un potencial humano tremendo que desde mi punto de vista, y creo que tengo razones suficientes para decirlo, no se ha cuidado como merecía”.
