Las finales y la clausura del XXXVII Trofeo Calasanz de futbito tuvieron lugar el sábado en el pabellón que posee dicho centro educativo en la capital herculina. Un total de novecientos ochenta niños y niñas, con edades comprendidas entre los seis y doce años, participaron en la presente edición en la que se inscribieron setenta y ocho equipos. Cuatrocientos ochenta y dos partidos se han disputado en las seis categorías programadas, que fueron las de Iniciación 2011, Iniciación 2010, Prebenjamín, Benjamín, Prealevín y Alevín.
El Club Deportivo Calasanz, organizador de este evento deportivo, quiso rendir un homenaje a la figura de Moncho Fonte Gundín, fundador y auténtico alma máter del club, que ha fallecido recientemente. Por este motivo, se recordó su trayectoria en la ceremonia de clausura con una semblanza realizada por Jesús Díaz, directivo de la entidad, y se entregó una placa a su hijo, César Fonte Ramos, en su memoria.
Gran deportividad
La jornada final vino marcada por la gran afluencia de público para presenciar los encuentros en los que se decidía el cuadro de honor en las diferentes categorías. Asimismo, los numerosos espectadores asistentes pudieron disfrutar del buen juego realizado por los más jóvenes en unos partidos que destacaron por la emoción y la gran deportividad, algo caracterísitico en este galardón. De este modo, las jugadas de calidad, los goles de bella factura y los regates habilidosos fueron de la mano con el ‘fair play’ que se vio en todo momento.
Mencionar, además, que varios enfrentamientos se decidieron en los compases finales y, como es algo habitual, en algunos lances la suerte también hizo acto de presencia lo que permitió que se pudiese disfrutar de una jornada de ensueño para todos los presentes.
Por último, indicar que José Manuel Sande, concejal de deportes de A Coruña, y representantes de todos los partidos de la corporación municipal de la capital herculina asistieron a la ceremonia de clausura.
