Coruxo y Pontevedra, enclavados en el Grupo 1 subgrupo A junto al Deportivo, se enfrentaron ayer en el Municipal de O Vao, en un duelo amistoso que se saldó con victoria de los pontevedreses, gracias a un solitario tanto de Rufino.
Los jugadores del Coruxo y del Pontevedra volvieron a sentirse futbolistas después de seis meses de haber disputado su último partido oficial. La pandemia que estamos viviendo trastocó la vida de todos, y el fútbol no iba a ser menos.
Duelo de 90 minutos
Para los dos equipos era el primer partido completo que jugaban, por lo que ambos técnico decidieron poner en liza a un equipo diferente en cada una de las partes.
Evidentemente no se pudieron sacar cosas en limpio, pues lo que se necesitaba por encima de todo era que los futbolistas comiencen a coger el ritmo y que, al mismo tiempo, se acostumbren al nuevo balón que utilizarán esta temporada.
Primera parte plácida
En la primera parte el juego estuvo más equilibrado, aunque con pocas llegadas a las áreas, con dos guardametas que tuvieron muy poco trabajo. Tanto Michel Alonso como Jesús Ramos quisieron poner en práctica todo lo que habían trabajado en los días previos, corrigiendo constantemente a sus jugadores.
Minutos de alternativas
La segunda mitad tuvo más ritmo, con un Coruxo que quizás presionó más y mejor, y que pudo abrir el marcador mediado el periodo, con un potente disparo de Rivera que se estrelló en el larguero.
Sin embargo, quien no falló fue el Pontevedra, que tras un saque de esquina el balón llegó al área, aprovechando Rufino para rematar de cabeza solo y marcar el único tanto del encuentro en el 83. Un partido que sirvió sobre todo para coger ritmo de competición a ambos equipos, a menos de un mes para que arranque el campeonato en Segunda B.
Hablan los técnicos
El técnico del Coruxo, Míchel Alonso, aseguró que era una “buena prueba, ante un rival de nuestra categoría, de los importantes”. Comentó que trataron de plasmar en los dos tiempos lo que están trabajando. Destacó que el segundo periodo fue “más intenso" .
Por su parte, Jesús Ramos, dijo que “las sensaciones fueron buenas", sobre todo a "nivel defensivo" y en ofensivo apeló a "mejorar un poquito".
