El extremo del Real Oviedo Omar Ramos fue presentado ayer oficialmente como jugador tras tres días entrenando ya con el equipo, ocasión en la que aprovechó para explicar que llega en buen estado de forma, pero no en su mejor nivel y que el Oviedo era “el mejor club” para él.
“He tenido varias ofertas pero el Oviedo me quería desde hace tiempo, es un buen club, con historia y gran afición y para mí sin duda era el mejor equipo para fichar, por eso estoy aquí”, comentó.
Para Ramos, que ya conocía a Champagne de jugar en el Leganés y a Dani Bautista -delegado- del Almería, la adaptación no está resultando complicada y se pone a disposición del míster, aunque reconoce que no está a su “mejor nivel” ni mucho menos.
“Poco a poco voy cogiendo el ritmo, llevo entrenando todo este tiempo en Tenerife: con entrenador personal por las mañanas y de tarde con un tercera. Se nota la diferencia, pero tercera es la categoría más alta que hay en las islas. Yo estoy bien, no en mi mejor momento por el tiempo que llevo sin jugar perro bien”, dijo.
El extremo, que puede jugar en la izquierda y en la mediapunta, reconoció que su posición favorita es la de la banda derecha a pierna cambiada, pero adelanta ya de mano que jugará donde el entrenador lo considere necesario.
“Vengo a ayudar al equipo a estar lo más arriba podemos, están haciendo las cosas bien, es un bloque que tiene buenos jugadores y que juega bien al fútbol. No hemos hablado de posiciones, me siento bien donde he jugado el último año, en la derecha y a pierna cambiada, pero jugaré donde sea”, concluyó el extremo.
Ramos, que ascendió a Primera con el Leganés, matizó que ese equipo solo tenía aspiraciones de conseguir la permanencia y que resultó clave la unión del vestuario.
