El Cádiz ratificó su hegemonía en la Liga Smartbank ganando a un Real Oviedo (0-2) que lo intentó con balón pero sin acierto de cara a puerta y que claudicó ante el líder de la categoría, al que dos ocasiones claras le sirvieron para que Álex Fernández y Querol sellaran los tres puntos para el conjunto gaditano.
El partido siguió un guión muy similar al que describió el técnico local Javi Rozada en la previa, con el Real Oviedo llegando y dominando y el Cádiz esperando su oportunidad a la contra, algo que se cumplió a la perfección en la primera mitad.
El equipo asturiano tuvo el balón y rondó el área defendida por Cifuentes aunque sin generar remates excesivamente peligrosos más que un tiro lejano de Tejera, algo que acabó pagando cumplida la media hora de juego porque los hombres entrenados por Álvaro Cervera no fallaron en la que tuvieron.
El conjunto gaditano fue quien se adelantó en la primera ocasión clara que tuvo en área contraria, un centro de Salvi desde la derecha que remata Álex Fernández en el área pequeña al fondo de la portería de Champagne justo después de adelantarse a Nieto.
Un forcejeo en el área, que acabó con un golpe de Fali a Christian, enturbió el final de la primera parte, acción en la que Ocón Arráiz decidió no señalar nada y tampoco añadir el tiempo perdido en la revisión por lo que el colegiado se retiró al túnel de vestuarios con una sonora pitada del Carlos Tartiere y con los ánimos entre los jugadores caldeados.
Tras la reanudación el Oviedo siguió siendo dominador, y continuó jugando en tres cuartos de campo, pero no logró perturbar realmente a Cifuentes.
El líder demostró su pegada en un remate de Querol, una acción inicialmente invalidada por fuera de juego pero que el VAR corrigió.
